Ismael Clemente, consejero delegado y alma mater de Merlin, comentaba hace un año que los bancos iban a estar más tiempo de lo que algunos pensaban en el capital de la socimi. El avispado directivo pacense sabía de lo que hablaba.
La prometida remuneración en forma dividendo, que el Banco Santander y el BBVA iban a percibir tras aportar las oficinas y centros comerciales de Metrovacesa al perímetro de la socimi, no ha tardado en llegar.
Los 0,2 euros brutos por acción que recibirán el próximo 25 de octubre se sumarán a la misma cantidad que hicieron efectiva el pasado 18 de mayo. Un total de 40 céntimos por título, equivalentes a 54 millones de euros.
O, lo que es lo mismo, 360.000 euros cada día en esos 5 meses. Un cambio de cabo a rabo respecto a los 64 millones de euros que Metrovacesa perdía en 2015, el último ejercicio antes de la fusión con Merlin.
Los dos bancos comprobaron rápidamente que colocarse al frente del accionariado de Merlin les iba a reportar notables ingresos.
En febrero de 2017, cuatro meses después de cerrarse la fusión con Metrovacesa, la socimi dirigida por Ismael Clemente, tras obtener un beneficio de 583 millones en 2016, comunicaba un aumento del dividendo complementario de 20 céntimos por acción sobre el ejercicio pasado que, unidos a los 20 céntimos ya pagados a cuenta, llegaba a los 40 céntimos. Un 28% más de los 0,31 euros brutos abonados en 2016.
Santander y BBVA, 135 millones de acciones
Ambas entidades no llegaron a tiempo de cobrar el dividendo del 25 de octubre de 2016 -el pago se produjo un día antes de que se comunicara la escisión total de Metrovacesa a favor de Merlin-, pero los casi 135 millones de acciones que ambas entidades suman en la socimi (104 millones el Santander y 30 el BBVA), reportaban ya 27 millones el pasado 18 de de mayo, la misma cantidad que recibirán el próximo 25 de octubre.
En mayo pasado, esos 20 céntimos abonados se distribuían, en parte como dividendo (0,1 euros por acción), y el resto como devolución de prima de emisión, en este caso por un importe bruto de 0,099 euros por título. El abono del próximo dividendo será ordinario, a cuenta del ejercicio 2017.
Participación directa e indirecta
Tanto el Santander como BBVA tienen repartida su participación en Merlin de manera directa e indirecta.
En el caso del banco presidido por Ana Botín, el capital directo en la socimi se eleva al 16,7% (más de 78 millones de acciones), quedando el 5,57% restante repartido en 4 vehículos: la sicav Cartera Inmobiliaria, con el 0,0213%, la filial inmobiliaria Altamira, que atesora el 0,7% de Merlin, la sociedad Títulos de Renta Fija -con un paquete de acciones irrelevante- y, sobre todo, Luri 6, el vehículo creado por el Santander, en noviembre de 2014, en sustitución del fondo Banif Inmobiliario.
Luri 6, sustituto del fondo Banif
Luri 6, sociedad presidida por Eduardo Quintana, que obtuvo en 2016 un beneficio de 86,7 millones, según las cuentas depositadas en el Registro Mercantil, atesora casi el 4,85% del capital de Merlin. Casi 23 millones de acciones que permitirán a Luri 6 ingresar 9,11 millones de euros en 2017 con los dividendos pagados por la socimi, el ya abonado en mayo y el que se hará efectivo el próximo 25 de octubre.
Por lo que al BBVA se refiere, el banco presidido por Francisco González cuenta con una participación directa en Merlin del 5%, quedando el restante 1,4% repartido en sus dos principales inmobiliarias, BBVA Propiedad y Anida Operaciones Singulares.
Dos sociedades cuyo futuro está en el aire, ya que el BBVA negocia en exclusiva con el fondo estadounidense Cerberus la venta de una participación mayoritaria de la gestora Anida, así como de un paquete significativo de sus activos adjudicados y créditos morosos, valorados en un nominal de unos 4.000 millones de euros.
Muro de los 12 euros
A la espera de cobrar el próximo dividendo, las acciones de Merlin han vuelto a toparse con el muro infranqueable de los 12 euros. Como ya ocurriera en diciembre de 2015 cuando, tres días antes de ingresar en el selectivo Ibex 35, Merlin cotizaba a 11,815 euros y, dos meses después, retrocedía un 25%, ahora está pasando algo similar. El pasado 15 de septiembre volvía a asomarse Merlin a los 12 euros (11,83 euros), y, desde entonces, la tendencia descendente ha vuelto a imponerse. Este martes cerraba en 11,08 euros.
No obstante, las últimas recomendaciones de los analistas ven a Merlin en otro escenario. Mucho mejor. Morgan Stanley, Deutsche Bank y el BBVA -en este caso, por su propio interés- abogan por comprar títulos de la socimi, llevando su precio objetivo a una horquilla de entre 13 y 14,5 euros. E incluso los que abogan por mantener o vender (como Bank of America, Mirabaud o BNP Paribas) lo hacen con precios de entre 11,5 y 12 euros la acción