Las acciones de la acería cerraron en 1.068 yenes (8 euros) después de jornada de cotización suspendida en la que cedió con fuerza con respecto al pasado viernes, la última sesión de cotización tras el descanso en la plaza nipona del lunes, por festivo.
La caída bursátil de Kobe Steel, una de las tres mayores acerías niponas, se produjo dos días después de reconocer la manipulación de los certificados de inspección de algunos de sus productos, que fueron "reescritos impropiamente y enviados como si cumplieran las especificaciones" requeridas por sus clientes, explicó en un comunicado.
La manipulación afectó en el último año a 19.300 toneladas de productos de aluminio laminado y extruido, unas 19.400 piezas de aluminio fundidas y forjadas, y unas 2.200 toneladas de productos de cobre, aunque la práctica se remonta a hace, por lo menos, 10 años, según ha reconocido Kobe Steel.
El escándalo de manipulación afecta a unas 200 compañías, entre ellas el fabricante de maquinaria pesada Mitsubishi Heavy Industries, que utilizó estos materiales en el cohete H-IIA lanzado hoy para poner en órbita un satélite de posicionamiento.
Mitsubishi Heavy Industries aseguró no haber detectado problemas técnicos asociados a ellos y dijo que examinará el resto de sus aparatos, recogió el diario Nikkei.
Otras empresas que reconocieron el uso de estos productos en sus artículos fueron los fabricantes de vehículos Nissan, Honda, Mazda, Toyota, que lo han detectado en alguno de sus modelos; así como Subaru, que los incluyó en la producción de sus aviones.
También la operadora ferroviaria Central Japan Railway usó estos productos en algunos vagones de los trenes de alta velocidad, donde estudian reemplazar los componentes fraudulentos en las inspecciones regulares de los convoyes, informó la cadena estatal NHK.
El aluminio se usa en vehículos, aviones y trenes de alta velocidad para reducir el peso e incrementar la eficiencia de combustible.