Indra indicó que el objetivo de esta iniciativa es contribuir a adaptar la normativa, los centros de control de tráfico y las infraestructuras a la conducción autónoma, con el fin de mejorar la interoperabilidad de los coches sin conductor.
El proyecto busca, a su vez, asegurar la correcta circulación de este tipo de vehículos en todo tipo de carreteras y en diferentes países europeos y su convivencia segura con el resto de automóviles en circulación.
Con esta intención, se desarrollarán servicios inteligentes de transporte basados en sistemas cooperativos que permiten la comunicación y el intercambio seguro de datos entre vehículos, usuarios e infraestructuras, para lo que se utiliza el estándar de comunicaciones europeo ITS-G5.
Indra indicó que, para el proyecto piloto de Madrid, se han desarrollado tres servicios inteligentes de transporte basados en sistemas cooperativos que ampliarán "la visión" del coche autónomo y facilitarán la toma de decisiones mediante avisos como notificaciones sobre obras en carretera, situación de tráfico o condiciones meteorológicas adversas.
La compañía apuntó que estos servicios se han integrado en la solución de tráfico y túneles Horus, que ha sido desarrollada por Indra, y para la que se ha creado un nuevo módulo que permite gestionar el envío de información al vehículo autónomo o conectado y aprovechar todos los datos que generan este tipo de modelos.
Para ello, se procesan los datos en tiempo real y se ofrece información de valor para la toma de decisiones de los gestores, de los propios vehículos conectados y de los conductores de los automóviles convencionales.