Cuando hace seis meses el fondo Castlelake, propietario al 100% de la promotora Aedas Homes, contrataba a Goldman Sachs y al despacho de abogados Linklaters para preparar la salida a bolsa de la inmobiliaria, no pensaba que lo fuera a hacer un día antes de que el Gobierno aplicara el artículo 155 de la Constitución sobre Cataluña y de que el Ejecutivo catalán pudiera declarar la independencia. Pero así ha sido. Y los presagios negativos se han cumplido, con una caída del 5,2% al cierre de su estreno bursátil.
Ya hace quince días, cuando registraba el folleto ante la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV), la promotora se cubría las espaldas ante la que se avecinaba, e incluía un párrafo, en el que recogía la “incertidumbre significativa” en Cataluña, que podría “afectar significativamente” a la actividad de la empresa, teniendo en cuenta que en esa región cuenta con el 16% de los suelos de su cartera.
Y las dudas se acentuaban también a la hora de fijar el precio de salida a bolsa, al situar este jueves ese valor en 31,65 euros por acción, el rango más bajo, muy por debajo de los 33,15 euros del umbral más alto.
Un precio que, al cierre de la sesión de este viernes, caía un 5,2%, hasta los 30 euros. De este modo, la inicial capitalización de los 47,9 millones de acciones de su capital social elevaban el valor de la empresa a 1.518 millones de euros y quedaba reducido a 1.439 millones.
A partir de ahora habrá que ver cómo evoluciona Aedas en los próximos días. Sus responsables, que acudían este viernes al tradicional toque de campana, confían en que el fiasco inicial se quede en eso y que, en las próximas semanas, se recupere el terreno perdido una vez que se aclare el panorama política en Cataluña.
Ismael Clemente, doblemente interesado
En esa foto de familia, junto al consejero delegado David Martínez figuraba, entre otros, el exconsejero de Telefónica Santiago Fernández Valbuena, como presidente no ejecutivo de Aedas, Miguel Temboury, el que fuera subsecretario del Ministerio de Economía y Competitividad en la anterior legislatura, entre diciembre de 2011 y septiembre de 2016, o Ismael Clemente, el consejero delegado de Merlin, convertido en el verdadero muñidor de la estrategia seguida por Aedas para convertirse en una de las grandes nuevas promotoras españolas.
El interés de Clemente en Aedas es doble. Por su propia presencia como consejero dominical en la inmobiliaria y también como casero. La socimi Merlin tiene arrendada a Aedas sus oficinas en el paseo de la Castellana 42, en Madrid, por un importe mensual de más de 40.000 euros.
El contrato en la capital vence el 1 de diciembre de 2023, con un plazo inicial de obligado cumplimiento de 5 años hasta el 1 de diciembre de 2020. También es Merlin el arrendador de las oficinas de Aedas en Barcelona, con un contrato que vence en septiembre de 2021.