El grupo que preside José Manuel Entrecanales enmarca la operación en su propósito de centrarse en sus tres líneas de negocio estratégicas, esto es, las infraestructuras de transporte y agua, y las energías renovables.

Acciona vende Trasmediterránea quince años después de su compra en 2002, en el marco del proceso que entonces abrió el 'holding' público SEPI para privatizar la compañía de transporte marítimo.

En la actualidad, la naviera es, según su vendedor, la mayor del país y una de las primeras de Europa. La compañía cuenta con una flota de 21 buques, con los que opera 32 rutas entre la Península, Balares, Canarias y ciudades del Norte de África.

El pasado año, Trasmediterránea elevó un 1,6% sus ingresos, de forma que generó 431 millones de euros, y disparó un 48,5% su beneficio bruto de explotación (Ebitda) hasta los 61 millones, gracias al crecimiento de los tráficos, la mejora de la eficiencia operativa y la reducción de los costes de combustible.

La naviera transportó 2,5 millones de viajeros en 2016, un 2,3% más, además de 5,8 millones de metros lineales de carga (+2,3%) y 576.000 vehículos (+5,7%).

Para el comprador, el grupo naviero Armas, Trasmediterránea resulta una firma complementaria, lo que le permitirá conformar un operador con nuevos mercados, mayor flexibilidad para competir en el transporte marítimo mundial.

Acciona prevé cerrar esta venta en el primer trimestre de 2018, una vez obtenga las pertinentes autorizaciones de las autoridades de competencia.

LIQUIDACIÓN DE DEUDA.

En virtud del acuerdo, del importe total de compra, el abono de 30,4 millones ha quedado aplazado. Además, el precio final podría aumentar en hasta 16 millones en función de la evolución del Ebitda del futuro grupo Armas.

Asimismo, esta compañía se ha comprometido a liquidar a Acciona el importe de 127,3 millones de euros que Trasmediterránea adeuda a distintas sociedades del grupo.

De esta forma, la operación permite situar el valor del 100% de Trasmediterránea en un importe de 419 y 435 millones de euros.

YA EN VENTA EN 2014.

Acciona ya tuvo colgado el cartel de 'se vende' sobre Trasmediterránea en 2014, en el marco del programa de venta de activos que el grupo puso entonces en marcha dentro del plan de ajuste que lanzó para amortiguar el impacto de la reforma energética aprobada en esas fechas por el Gobierno.

No obstante, la compañía paralizó un año después la desinversión de la naviera ante la positiva situación y perspectivas que comenzó a mostrar y el cambio que el contexto económico comenzó a mostrar en 2015. Además, indicó que las ofertas que entonces había recibido por la firma "no reflejaron realmente el valor y el potencial de la empresa".

Por todo ello, y las medidas de eficiencia que implementó en la naviera, entonces optó por quedársela y "aflorar todo su potencial de valor".

Ahora, dos años después, Acciona cierra finalmente su venta "en el momento más oportuno de recuperación del sector del transporte marítimo, tras un proceso de mejora de la eficiencia operativa de la empresa y con un comprador español del sector que conoce bien el mercado y que reforzará la posición competitiva de Trasmediterránea", según destacó Entrecanales.