Algunos expertos del sector aseguran que los centros comerciales ya no son lo que eran. Que los hábitos han cambiado, los clientes prefieren comprar en el centro y no coger el coche para llenar la nevera. Lidl, el quinto operador de distribución en España, no lo cree así y se ha propuesto desmontar la teoría. ¿Cómo? Abriendo su primera tienda en un centro comercial.
Ha sido esta semana cuando la compañía alemana ha abierto las puertas de la tienda, con una superficie de ventas de 1.500 metros cuadrados, en la que ha invertido más de un millón de euros.
"La estrategia de expansión de Lidl se centra en estar cada día más cerca del cliente y, al ser polos de alta actividad comercial, los centros comerciales son espacios de interés para nosotros", dicen desde la compañía a este periódico.
En este sentido, no creen que sea un error abrir un supermercado en un centro comercial. Al menos, en este caso concreto. En el centro comercial Islazul de Madrid, dará servicio a Carabanchel, Leganés y Getafe. "Por su ubicación, las firmas que están implantadas y por el número de visitantes (12 millones anuales), se trata de un centro con gran actividad comercial", apuntan.
Crecen las ventas en los centros comerciales
A pesar de que muchas de las grandes cadenas están optando por estar cada vez más cerca del centro de la ciudad, atendiendo a "los nuevos hábitos de compra", lo cierto es que las ventas en estos establecimientos han crecido un 3,6% en 2016 en comparación con el ejercicio anterior, hasta alcanzar los 42.464 millones de euros.
Según los datos recogidos por la Asociación Española de Centros y Parques Comerciales (AECC), la afluencia estimada fue de 1.935 millones de visitas, aumentando un 1,5% respecto a 2015.
El desembarco de Lidl en Islazul no es casual. Se produce por la -profunda- renovación del centro comercial después de que TIAA Henderson Real Estate (THRE) lo adquiriera.
Entre las cadenas que también tendrán su espacio en este centro se encuentra, por ejemplo, Primark. Ocupará 7.200 metros cuadrados, por lo que ese local se convertirá en el segundo en Madrid, solo por detrás de la tienda de Gran Vía.
Lidl, el quinto operador de la distribución en España, cerró el ejercicio de 2016 con una facturación de 3.335 millones de euros, es decir, un 9,4% más que en 2015. La compañía tiene hoy una plantilla de 12.500 empleados y cuenta con 540 establecimientos.
Siguen abriendo
Quizá la forma de conjugar los nuevos hábitos de compra -sin salir de la ciudad- con el centro comercial sea el nuevo Plaza Río 2. Este centro comercial, que abrió sus puertas la semana pasada en el margen del Manzanares en Madrid, presume de estar ubicado en el centro de la ciudad.
En él se dan cita firmas internacionales que normalmente no operan en estos espacios, como es el caso de Victoria's Secret y Armani. Además, cadenas que tradicionalmente están ubicadas en centros comerciales, como H&M, también quieren presentar innovaciones. La sueca, por ejemplo, incorporará su línea Home por primera vez en Madrid.
Plaza Río 2 es el último proyecto del gigante inmobiliario francés La Société Générale Inmobilière (LSGI). Con una inversión cercana a los 200 millones de euros, esta compañía ha colgado el cartel de completo en su zona comercial, de 38.931 metros cuadrados.
Hoy hay 550 centros y parques comerciales en España y suman 15.595.800 metros cuadrados de SBA (Superficie Bruta Alquilable) integrando a cerca de 33.500 comerciantes. Pero lejos de ver disminuir la cifra, la AECC espera que sigan creciendo. Entre 2017 y 2019, de hecho, está previsto que se pongan en marcha 27 nuevos proyectos entre aperturas y ampliaciones que sumarán más de 1.300.000 metros cuadrados de nueva superficie comercial.
En un tiempo en el que los centros de las ciudades ven cómo sus calles están cada vez más repletas de grandes cadenas, está por ver qué espacio gana la batalla de los clientes.