La cifra de negocio del grupo que aglutina marcas como Special K, All-Bran o Choco Krispies ascendió a 3.273 millones de dólares (2.812 millones de euros) entre los meses de julio y septiembre, un 0,6% más que en el trimestre equivalente del ejercicio anterior.
"Estos resultados nos posicionan en el buen camino para cumplir con los objetivos financieros para el conjunto de 2017", señaló el presidente de Kellogg's, John Bryant.
Por su lado, el nuevo consejero delegado de Kellogg's, Steve Cahillane, que se coloca como el undécimo directivo ocupando este cargo en la historia del grupo, explicó que los resultados del tercer trimestre y las perspectivas financieras de 2017 "son el testimonio del buen camino de la estrategia vigente, así como la adquisición de las barras alimenticias RxBAR, que servirá como una plataforma adicional para el crecimiento ".
Entre enero y septiembre, Kellogg's contabilizó un beneficio neto de 841 millones de dólares (722,4 millones de euros), un 12,5% más, mientras que la facturación se situó en 9.714 millones de dólares (8.345 millones de euros), un 2% menos que los ingresos obtenidos en los nueve primeros meses de 2016.
Por último, el grupo ha confirmado sus estimaciones financieras para el conjunto del ejercicio, por lo que mantiene sin cambios el pronóstico de crecimiento de las ventas de un 3% para el año fiscal de 2017 y que las ganancias operativas se impulsaran en torno a un 8% y un 10%.