En una comunicación a la CNMV, el regulador bursátil, Cementos Molins, que el pasado 20 de octubre trasladó su sede social de Sant Vicenç dels Horts (Barcelona) a Madrid debido a la situación política en Cataluña, facturó hasta septiembre un total de 586,3 millones de euros, un 16,2 % más.
Aunque la depreciación de las divisas -principalmente el peso argentino y el mexicano- restó 3,9 millones al beneficio neto, el beneficio bruto de explotación o Ebitda mejoró en mercados como el argentino, el mexicano o bien el español.
En España, el Ebitda sumó 7 millones, un 151,7 % más; en Argentina, el beneficio operativo ascendió a 11,7 millones, un 53,8 % más; y en México se elevó hasta los 27,7 millones, un 18,2 %.
En cambio, se registraron descensos en otros mercados, como Uruguay (- 17 %), Bangladesh (- 38,4 %) o Túnez (- 8,3 %).
Cementos Molins ha invertido hasta septiembre unos 40 millones de euros, principalmente en proyectos como la fábrica de Olavarría (Argentina), finalizaciones de obras en la nueva fábrica de Bolivia y en la construcción de una nueva planta en Colombia.