Los ingresos operativos ascendieron a 1.458,2 millones de euros, un 5 % más que entre enero y septiembre de 2016, mientras que el resultado bruto de explotación (ebitda) alcanzó 256,6 millones de euros, lo que supone un incremento del 6,9 %.
En un comunicado, el grupo valora especialmente la mejora en el margen de ebitda (42 puntos básicos) gracias a la optimización de costes desarrollada y a las acciones de mejora de la eficiencia en las ventas.
Los resultados financieros muestran el mantenimiento del ratio Deuda Neta/ebitda entre 2 y 2,5 veces y el impacto negativo de la evolución del tipo de cambio dólar-euro, que la compañía contrarrestó consiguiendo reducir el tipo de interés medio de la deuda hasta el 3,3 % y extender los periodos de amortización.
El negocio hotelero fue, una vez más, la más importante palanca de crecimiento del grupo, en un trimestre en el que no se registraron plusvalías por rotación de activos.
Así, el RevPAR se incrementó globalmente en un 6,1 %, atribuido íntegramente al factor precio, con incrementos dignos de mencionar fundamentalmente en España, donde el RevPAR global se incrementó en un 12,3 %, que se tradujo en un incremento del 8,1 % en el segmento resorts y del 17,8 % en el de hoteles urbanos.
El grupo se mostró especialmente satisfecho de la mejora en el Ebitda del modelo de negocio basado en hoteles de gestión que, con un 9,2 % de incremento.
El grupo asegura que sigue cumpliendo con creces sus objetivos de expansión internacional: hasta la fecha Meliá ha incorporado 27 hoteles en su pipeline de aperturas en los mercados de mayor interés y seguridad, incluyendo dos en Vietnam, dos en Malasia, dos en China, dos en Tailandia, tres en Portugal, dos en España, uno en Argentina, dos en Italia, dos en Antillas Francesas, uno en Albania y ocho en Cuba. La compañía espera anunciar nuevas firmas antes de finalizar 2107.