El índice Ibex 35 cerró este lunes en 9.990 puntos, lo que supone bajar por primera vez del umbral de los 10.000 puntos después del fuerte golpe que ya supuso el 1-O para los mercados españoles.
De la mano de los esperanzadores datos de la economía española, la bolsa española había conseguido levantar el vuelo el pasado marzo, cuando superó por primera vez los 10.000 puntos. Era la primera vez desde diciembre de 2015. Pero diez días de bajadas consecutivas han vuelto a romper un suelo de cristal que Cataluña ya había hecho añicos tras el 'referéndum' catalán.
El selectivo español pierde un 5% en lo que va de mes, dejando su revalorización anual en un 7%. Aunque Técnicas Reunidas remontaba ligeramente este martes, su recorrido en lo que va de año ha ido de pasar de juguetear con los 40€ a luchar por recuperar los 23€. Parecida situación la de Siemens Gamesa, que acumula una caída anual próxima también al 40%. Además, cerró la sesión con una caída del 2,59% por el ‘profit warning’ de Nordex.
El Ibex no lo pasaba tan mal desde diciembre de 2015, cuando también se vieron diez jornadas de caídas consecutivas. Si bien hay que poner en perspectiva la situación. En aquel entonces la caída fue de más del 10% y llevó a una tendencia bajista muy prolongada que puso el selectivo por debajo de los 8.000 puntos en los meses de febrero y junio de 2016. El mercado, recordemos, llevaba sin ver esos niveles desde 2013. El descenso de este martes, por más que haya sido por un declive paulatino, dejó el selectivo por encima de como lo dejó el referéndum catalán en un par de sesiones.
Colonial y Mediaset fueron los respiraderos del selectivo, con sendas subidas del 1,38% y del 1,36%, respectivamente.
El ancla Puigdemont
Uno de los problemas del Ibex español es que cuando el resto de bolsas crecen, da la impresión de que la situación de incertidumbre en Cataluña impide captar el crecimiento. Y cuando bajan, la española se va con ellas. Es el caso de lo sucedido en los últimos días, en momentos en los que las alertas sobre un Brexit duro preocupan a los mercados financieros.
En los mercados de deuda, la prima de riesgo española se situaba en los 112 puntos básicos, con la rentabilidad del bono a diez años en el 1,515%. Mientras, en los mercados de divisas, el euro se intercambiaba por 1,17655 dólares.