Por esa nueva normativa, que ha provocado numerosas críticas, la compañía asignará a los viajeros un número entre el uno y el cinco, impreso en su tarjeta de embarque, siendo la cifra más alta la reservada para las tarifas económicas y la más baja para aquellos que viajan en primera clase.
BA explicó que con esa política pretende simplificar el proceso de embarque, en línea con otras aerolíneas que ya llevan un tiempo aplicándola, como American Airlines e Iberia.
No obstante, entre los detractores de la nueva política figuran los que consideran que BA opera, de esta manera, "un sistema de clases".
La empresa aclaró que los pasajeros que se desplazan con niños o tienen algún problema de movilidad podrán embarcar antes que el resto.
"Siempre estudiamos diferentes maneras de mejorar y simplificar la experiencia del aeropuertos para nuestros clientes. El próximo mes introducimos nuevos procedimientos de embarque a fin de acelerar el proceso y hacer que resulte más sencillo de entender a los pasajeros", apuntó hoy una portavoz de BA.
La misma fuente de la aerolínea británica agregó que "este método lleva varios años siendo empleado por aerolíneas de todo el mundo, entre ellas American Airlines, Iberia y Qatar".
Tras conocerse esta novedad, algunos usuarios de BA han manifestado su disconformidad en sus cuentas de la red social Twitter, en la que algunos pasajeros reprochan a la compañía que opte por un sistema "ostentoso, que versa sobre la riqueza y el estatus" de los viajeros.
Otros han ironizado con mensajes como éste: "Nada como un sistema de clases británico para hacerte saber cuál es tu lugar".