El futuro de Isolux en España queda garantizado. El actual equipo directivo que lidera el consejero delegado, Federico Ávila, ha conseguido hacerse con el negocio constructor en España en pleno concurso de acreedores de la compañía. La oferta presentada al administrador concursal ha resultado vencedora por ser la mejor económicamente, y ser la que más puestos de trabajo garantiza.
Según ha podido conocer EL ESPAÑOL de fuentes cercanas a la operación, Ávila y su equipo están apoyados por un fondo de inversión cuyo nombre no ha sido desvelado, como tampoco la cantidad que han ofrecido en la puja por la unidad española y sus activos más productivos. En ella había otras 4 ofertas que resultaban inferiores.
Además, garantizan un centenar de puestos de trabajo, así como la creación de una bolsa de empleo para las futuras contrataciones. De este modo, los empleados de la 'antigua' Isolux tendrán prioridad a la hora de acceder a la empresa.
Activos productivos
De este modo, y a través de una operación de 'management buyout', se quedan con los activos productivos y viables de la compañía de construcción e ingeniería. Hablamos de cerca de 140 proyectos de obra civil e instalaciones.
Entre ellos, según ha podido saber EL ESPAÑOL, diversos contratos con ADIF como varios tramos para el AVE a Galicia; pero también la presa del Almudévar.
Los gestores se quedarán, además, con la marca Isolux; para lo que se creará una figura similar a lo que ocurrió en el proceso de Pescanova con la creación de Nueva Pescanova.
Con este proceso, el resto de activos de la unidad española (los improductivos) sy el resto de activos y del negocio internacional de Isolux continúan el procedimiento bajo la administración concursal.
La oferta actual contempla mantener, aproximadamente, al 18% de los empleados de Isolux en España, por lo que el ERE planteado por el administrador para el resto de la plantilla se mantiene. De hecho, está previsto que la próxima semana comiencen las negociaciones con los sindicatos.