La compañía ha precisado que este resultado se ha visto afectado de forma extraordinaria por la contabilización de ingresos financieros por importe de 23,5 millones de euros tras el cierre de la reestructuración de su deuda con la banca, así como por la entrada de nuevos inversores, que han aportado 8,5 millones de euros.
También ha repercutido el cierre de la filial en Argentina, que se encuentra actualmente en proceso de liquidación, así como por el deterioro final de la filial italiana dentro de los planes de restructuración de la compañía.
Las ventas cayeron un 34%, hasta situarse en los 23,1 millones de euros, debido al cierre de tiendas y a que mercados relevantes como España e Italia no se han recuperado como se esperaba, mientras que Rusia se ha comportado peor de lo previsto.
El resultado bruto de explotación (Ebitda) arroja pérdidas de 5,3 millones de euros, mientras que la deuda financiera neta se sitúa en 14,8 millones de euros al cierre del semestre, lo que supone un descenso de 22,4 millones de euros respecto del primer semestre de 2016.
Imaginarium ha cerrado en este periodo 58 tiendas en los mercados en los que está presente, hasta quedar con 310 establecimientos.