Indra, el grupo tecnológico presidido por Fernando Abril-Martorell, prevé un crecimiento anual del resultado neto de explotación (Ebit) superior al 10% entre 2016 y 2020, con un ligero crecimiento de dígito simple en sus ingresos, según consta en el Plan Estratégico 2020 remitido este jueves a la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV).
Asimismo, estima una caja generada de entre 550 y 650 millones de euros entre 2018 y 2020, tras obtener una caja de aproximadamente 610 millones previstos entre 2015 y 2017, excluyendo el impacto estimado asociado a la salida de caja de la adquisición de Tecnocom (191 millones de euros), los planes de reestructuración (129 millones de euros), los proyectos onerosos (145 millones de euros) y el Capex acumulado en el periodo.
La compañía tecnológica logró un Ebit proforma de 180 millones de euros en 2016 y unos ingresos proforma de 3.121 millones de euros, incluyendo la consolidación total de Tecnocom.
En concreto, las inversiones previstas para el periodo 2015-2017 se sitúan entre 100 y 110 millones y entre 150 y 200 millones de euros entre 2018 y 2020.
Entre 2018 y 2020, Indra prevé continuar con el desapalancamiento y restablecer la política de dividendo, sin descartar además adquisiciones selectivas.