Por Andreas Cremer
Los pasos para reducir los costes en 10.000 millones de euros, recortar la burocracia y reforzar los lazos con Porsche, otra marca del grupo Volkswagen, están "incrementando gradualmente nuestra libertad de acción organizativa para la reorganización estratégica", dijo Stadler a periodistas.
No hay por ello necesidad económica de vender Ducati, dijo Stadler. Volkswagen pidió a los bancos que evaluaran las opciones para Ducati y el fabricante de transmisiones Renk este año, mientras buscaba agilizar la transición hacia los vehículos eléctricos y autónomos tras el escándalo de las emisiones diésel.
"Puedo garantizarles que Ducati pertenece a la familia Audi", dijo Stadler.
Los planes se habían estancado ya en el verano cuando los poderosos sindicatos de VW, respaldados por los clanes familiares Porsche-Piech que controlan el grupo, se opusieron a la lógica y necesidad de vender activos ante la resiliencia financiera del grupo.
Inversores y potenciales compradores de Ducati, sin embargo, esperan que VW pueda cambiar de opinión de nuevo y optar finalmente por vender un activo que dicen que ha perdido importancia estratégica para el grupo alemán.