La gestión de Bankia está enfocada a maximizar el beneficio y lograr recuperar la mayor cantidad de ayudas públicas posibles. Así lo ha explicado su consejero delegado, José Sevilla, quien cree que el Estado cuenta con “espacio suficiente para seguir colocando paquetes en bolsa” que le permitan recuperar el dinero invertido en la entidad.
Unas palabras que llegan horas después de que el FROB haya reducido su participación en Bankia hasta el 60% tras vender entre inversores institucionales un 7%. Un proceso que se tendrá que ir repitiendo durante el próximo año, ya que antes de finalizar 2019 el Estado tendrá que haber desinvertido por completo en el banco.
Ese proceso de venta por paquetes, ha explicado Sevilla, se ha llevado a cabo en Europa -por ejemplo con Deutsche Bank- y “se ha privatizado totalmente”.
Planes de futuro
Sea como sea el plan del equipo que lidera José Ignacio Goirigolzarri sigue adelante con sus planes. Ahora mucho más extensos, gracias -sobre todo- a la eliminación de las limitaciones fijadas por la Unión Europea tras el rescate.
Aunque no ha desvelado todos los planes, sí ha reconocido que comenzarán a trabajar “negocios en los que hoy no estábamos como el crédito promotor o negocios con grandes empresas y mercado de capitales”.
La primera manifestación de ese cambio será, ha dicho, la integración con BMN “que esperamos culminar en el plazo de un año” a contar desde el momento en el que se reciba la autorización. Algo que, por cierto, debería suceder en las próximas semanas.
Presión sobre el balance
Palabras de Sevilla en el 13 Encuentro del Sector Bancario organizado por el IESE y EY, quien ha señalado que el principal reto de la banca seguirá siendo maximizar la rentabilidad en un momento en el que los tipos de interés están en mínimos históricos. Algo que va a “presionar” la cuenta de resultados durante el 2018.
Por eso la eficiencia será fundamental en los próximos meses “y ahí hay muchas palancas” que se deberán seguir activando, y que dependerá de cada entidad. Eso sí, se muestra convencido de que es probable ver nuevas fusiones nacionales en el medio largo plazo. No así a nivel transnacional.
Para Sevilla la necesidad de fusiones entre banco europeos es algo que está lejos de alcanzarse, pese a los esfuerzos del regulador. “Una cosa son los deseos, y otra la realidad”, ha sentenciado, para explicar a continuación que hay muchos pasos a dar para conseguir la unión bancaria.