El consejo de administración de Cementos Molins ha acordado hoy distribuir un dividendo de 0,12 euros brutos por acción a cuenta de los beneficios del ejercicio 2017.
Este dividendo se pagará el 11 de enero de 2018 y los accionistas recibirán un importe neto de 0,0972 euros por título, una vez aplicada la retención fiscal correspondiente, según ha informado hoy la compañía a la CNMV, el regulador bursátil.
La cementera catalana, que cerró 2016 con un beneficio de 63,9 millones de euros, ha alcanzado en los nueve primeros meses de 2017 unas ganancias de 68 millones, un 33 % más que en el mismo período de 2016.