Según dijo el jueves la empresa de tecnología en un comunicado a la CNMV, Espinosa continúa como consejero de la sociedad.

El expresidente de Amper tiene una participación del 2,3 por ciento del capital de compañía y llevaba desde febrero de 2009 en la presidencia, aunque fue a principios de 2014 cuando asumió el cargo de máximo ejecutivo.

El Consejo de Administración ha acordado igualmente la creación de una Comisión Ejecutiva del Consejo, compuesta por Fernández González (que tiene un 1,6 por ciento del capital) y los consejeros Rafael Cabezas y Andrés Casado.

El cambio en la cúpula se produce en un momento en el que la empresa está buscando financiación para paliar el efecto del retraso en la venta de sus filiales en el Pacífico Sur.

Este mismo mes, Amper informó de que la venta se ha retrasado al no haber obtenido los permisos pertinentes en Estados Unidos y que ahora espera cerrar en el primer semestre de 2018, en lugar de a finales de este año.

Esta venta, que permitiría a Amper ingresar 79 millones de dólares -- de los que ya ha cobrado 26 millones -- es clave para el grupo, ya que además supondría una plusvalía de unos 20 millones de dólares.

La tecnológica ha sufrido una profunda reestructuración en los últimos años en los que ha vendido divisiones --incluso a ex directivos, como en el caso de algunos activos de Latinoamérica--, ha solicitado préstamos a muy alto interés y ha reenfocado su estrategia en un intento de sanear su balance.