Metrovacesa inició este lunes el proceso para salir a cotizar en Bolsa en lo que será el primer estreno en el mercado del año y el tercero de una promotora inmobiliaria desde la crisis.
La compañía saldrá al parqué con una cartera de suelo valorada en 2.600 millones de euros, mediante una venta de acciones por parte de sus dos accionistas, Santander y BBVA, que actualmente controlan el 70% y el 30% de su capital, respectivamente, según el anuncio previo de la operación remitido a la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV).
Estos bancos no concretaron el porcentaje de la compañía que colocarán en el mercado, una operación con la que buscan "monetizar" su inversión en la inmobiliaria, además de "ampliar su base de accionistas y mejorar el acceso a los mercados de capitales y la financiación".
Metrovacesa protagonizará así la primera salida a Bolsa de un año que precisamente estará marcado por los estrenos de empresas del sector, dado que en los próximos meses también se espera que comiencen a cotizar la promotora Vía Célere y la socimi de pisos en alquiler Testa Residencial.
Metrovacesa será además la tercera promotora inmobiliaria en salir al parqué tras la crisis, después de que en 2017 lo hicieran Neinor Homes y Aedas Homes.
37.500 nuevas viviendas
En el caso de la compañía que dirige Jorge Pérez de Leza, lo hará después de que el pasado año sus dos bancos accionistas relanzaran el negocio de construcción y venta de viviendas con que Metrovacesa se quedó tras vender la cartera patrimonial a Merlín Properties.
Así, Metrovacesa, saldrá al mercado con una cartera de suelo de 6,1 millones de metros cuadrados de superficie, valorada en unos 2.600 millones de euros que, según sus datos, la erigen en una de las mayores propietarias de suelo del país. Estos terrenos, repartidos por 31 provincias, permitirán levantar 37.500 nuevas viviendas.
Parte de esta cartera de suelo ha sido además inyectada en el último año por Santander y BBVA a través de dos ampliaciones de capital no dinerarias por valor de 1.424 millones de euros.
A partir de estos terrenos, la compañía está abordando un plan de negocio, que actualmente está en plena "fase de aceleración", con "más de 2.300" viviendas en promoción, un volumen que irá aumentando para iniciar entre 4.000 y 5.000 nuevos pisos anuales en los próximos ejercicios.
Además, asegura no necesitar comprar suelos adicionales para cumplir con estos objetivos de entrega de viviendas para los próximos años, lo que, según la empresa, otorga "sostenibilidad a su modelo de negocio y un perfil de generación de caja único".
Vuelta de una firma centenaria
Una vez enviado este anuncio previo de venta de acciones, la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV) debe analizar y aprobar el folleto de la operación de venta de títulos, en el que se detallará el porcentaje de acciones que se venden y el precio, así como el calendario concreto de la colocación.
La salida a Bolsa de la compañía coincide con el centenario de su constitución y, de hecho, supondrá su regreso al mercado, que abandonó cuando en enero de 2013, tras casi medio siglo de cotización, los bancos tomaron el control de compañía al ejecutar la deuda de sus entonces accionistas de control.
Una vez superada la crisis, ante la recuperación del sector inmobiliario en España y tras la venta de la cartera de patrimonio a Merlín, Santander y BBVA, los dos bancos que se han mantenido en su accionariado, han resuelto relanzar la compañía y aprovecharla como plataforma para dar salida a los terrenos que tienen en sus balances.