Pizza Hut lleva tiempo desarrollando nuevas opciones de envío, incluyendo sistemas de pedidos por voz o proyectos pilotos de reparto de cerveza y vino. Y ahora ha anunciado un nuevo proyecto, que podría llegar a las calles o no, que consiste en un vehículo autónomo capaz de repartir e incluso cocinar las pizzas y que ha sido desarrollado junto con Toyota.
Esta forma de utilizar su concepto e-Palette de la japonesa recuerda poderosamente al vehículo de reparto ficticio que aparecía en el episodio Crocodile de la cuarta temporada de Black Mirror.
"Nos emociona esta alianza con Toyota, un líder indiscutible con una reputación en innovación, fiabilidad y eficiencia, a medida que definimos la experiencia de reparto de pizzas en el futuro", señaló en un comunicado el presidente del coloso mundial de la pizza, Artie Starrs.
Toyota, que en el marco de la Feria de Electrónica de Consumo (CES) que se celebra en Las Vegas, ha asegurado haber atraído el interés de otras empresas como Mazda, Uber o Amazon, planea comenzar las pruebas del vehículo en 2020.
Pizza Hut necesita este tipo de notoriedad tras haber perdido cuota de mercado frente a rivales como Domino´s o Papa John´s durante el pasado año.
En Black Mirror, la furgoneta no era de Pizza Hut, sino de una pizzería imaginaria con el nombre Fences Pizza. La misma empresa ficticia que repartía los pedidos en el primer episodio de la misma temporada, USS Callister.
Las tres dudas que nos quedan es si veremos finalmente este tipo de vehículos en la calle, si llegarán a España y si Telepizza se atrevería a hacer algo así. ¿Los grandes perjudicados a largo plazo? Los motoristas.