Vientos de renovación en Iberostar. La cadena hotelera suma ya más de 60 años de historia y encara el futuro con buen pie tras hacer un profundo análisis y redefinición de su identidad y objetivos.
Según su vicepresidenta y consejera delegada, Sabina Fluxá, la cadena mallorquina ha invertido más de 500 millones de euros en los últimos seis años tanto en la adquisición de nuevos establecimientos como en las reformas necesarias para poner a punto su porfolio. En este tiempo han renovado el 70% de sus establecimientos y la hotelera se jacta de estar únicamente en el segmento premium. Todos sus hoteles son ya de categoría cuatro y cinco estrellas y se ha hecho especial hincapié en la innovación de los productos y servicios y en el desarrollo tecnológico.
“Este compromiso de inversión se va a mantener”, aseguró Fluxá. “Vamos a invertir 700 millones adicionales en los próximos años para reforzar nuestro posicionamiento en el segmento hotelero de primer nivel”. La vicepresidenta de Iberostar señaló que su objetivo es mantener también el ritmo de aperturas, con siete nuevos establecimientos al año, como han sumado en los últimos años.
En el horizonte, Barcelona. La cadena que preside Miguel Fluxá abrirá en unos días su primer hotel en la Ciudad Condal, en una ubicación inmejorable “como todos los hoteles Iberostar”, en pleno Paseo de Gracia. Pero más allá de las ubicaciones en España, la hotelera tiene su vista puesta en el mercado internacional. Para los próximos años Iberostar espera lograr nuevas ubicaciones en Cuba, México, Santo Domingo, Aruba, Perú y en la baja California, entre otros, señaló Fluxá.
Nueva segmentación
Una de las aristas de su plan de reposicionamiento ha sido la reorganización de sus hoteles en tres grupos, todos bajo la enseña Iberostar: hoteles de ciudad, hoteles de playa y hoteles con historia. Este último segmento, bautizado como Iberostar Heritage, incluye “una colección de hoteles singulares ubicados en edificios que por su arquitectura o significado histórico-cultural, con un valor y encanto especiales”, indicó Fluxá.
Por último, la hotelera ha desarrollado una categoría de lujo transversal a las otras tres, Grand, que comparte con los establecimientos Heritage la búsqueda de ubicaciones y edificios singulares.
Actualmente, la hotelera -cuyo capital continúa al 100% en manos de la familia Fluxá- cuenta con 110 hoteles en 17 países, con los que suma más de 39.000 habitaciones. En el último año, más de 8 millones de personas han elegido un hotel Iberostar en sus viajes, señaló la vicepresidenta de la compañía. Además, el 42% de sus clientes vuelve, agregó.
Fluxá adelantó que, en el ejercicio de 2017, el grupo Iberostar registró unos ingresos de casi 2.500 millones de euros, un 25% más respecto al año anterior y que continúa la tendencia positiva de los últimos cuatro años. Además de la cadena de hoteles, el grupo cuenta también con una división de receptivo y otra inmobiliaria, especializada en el desarrollo de complejos residenciales de alta categoría.