En el último trimestre del año, la entidad financiera más importante de Suiza registró importantes pérdidas, equivalentes a 2.224 millones de francos (1.890 millones de euros), frente a un resultado positivo de 636 millones de francos en el mismo periodo de 2016.

El banco atribuyó este resultado negativo en el último trimestre del año pasado a los ajustes que tuvo que realizar -como el resto de entidades- debido a la reforma fiscal en Estados Unidos.

Esa reforma redujo la tasa de imposición fiscal de las sociedades del 35 % al 21 %, lo que obligó a los bancos a reducir el valor de sus activos por impuestos diferidos.

En el caso de UBS esa depreciación supuso 2.860 millones de francos (2.430 millones de euros), lo que afectó su resultado del conjunto del año.

Al comentar sus resultados, el banco consideró que 2017 fue ?excelente?, ya que su beneficio anual ajustado antes de impuestos aumentó un 19 %, hasta 6.335 millones de francos (5.383 millones de euros).

?¡2017 ha sido un año excelente para nosotros porque hemos conseguido un resultado financiero más fuerte y alcanzado nuestros objetivos de reducción de costes netos?, dijo el consejero delegado de UBS, Sergio Ermotti, en un comunicado.

El ejecutivo destacó que la ?claridad? que ahora existe en términos de regulación abre ?un nuevo capítulo? para el banco, que se podrá concentrar mejor en el crecimiento de todos sus negocios. EFECOM

is/ltm