Dancausa ha explicado que durante las primeras semanas posteriores al referéndum del pasado 1 de octubre en Cataluña, existió mucho movimiento e inquietud, ¿porque el dinero es muy miedoso¿. La directiva ha explicado que ¿en el banco no hemos sido nada proactivos en atraer dinero y aprovecharnos de la crisis catalana. Es más, me hubiera gustado que ese dinero no hubiera llegado¿.

Respecto a la crisis política, la directiva explicó que ¿Cataluña es muy importante para Bankinter, al representar un 14% del total de ingresos¿, esperando que la situación se solucione lo antes posible para una región ¿referente en el mundo del arte, la investigación, la clase empresarial, el emprendimiento¿ queremos ver a Cataluña dentro de España¿.

La misma postura mantiene con los movimientos producidos tras la resolución del Banco Popular, indicando que sí hubo clientes de la entidad resuelta que se acercaron a las puertas de Bankinter para traspasar sus cuentas. Sin embargo, Dancausa asegura que ¿nos hemos beneficiado mucho menos que otras entidades¿.

Impuestos a la banca

Frente a las propuestas políticas para imponer un impuesto a la banca, la directiva indica que ¿el argumento de que la banca debe pagar la factura del rescate es una falacia, porque al final, los impuestos los pagan los ciudadanos¿. A su juicio, el rescate público fue a una serie de cajas de ahorro ¿gestionadas nefastamente por políticos¿, insistiendo en que ¿los bancos sanos hemos hecho mucho por la industria, como entrar en Sareb, que fue un acto de solidaridad para salvar al sector¿.

Previsiones para 2018

En una visión más a largo plazo, Dancausa explicó que para este 2018 el sector pasará por momentos de importantes presiones, tanto regulatorias, como en el segmento de ingresos, gastos, en los tribunales, o la revolución tecnológica y la ciberseguridad, así como la mencionada incertidumbre política de Cataluña.

De todas sus líneas de negocio, la directiva indicó que, específicamente para Bankinter, el mayor reto está en mantener el crecimiento en el negocio de banca de empresas, en un entorno de tipos de interés que complica crecer a base de mayor volumen y ganar cuota de mercado para compensar los menores precios de los competidores. El siguiente reto, será la madurez del negocio de Bankinter en Portugal. La directora financiera de la entidad, Gloria Hernández, ha avanzado que el banco podría lanzar en la segunda mitad del año una emisión destinada a cumplir el requerimiento mínimo de fondos propios y pasivos admisibles (MREL, por sus siglas en inglés) por unos 500 millones de euros, aunque sin desvelar el instrumento elegido para la emisión.

Dancausa espera cerrar el año con un beneficio mayor al de 2017, de forma sostenida. ¿Sería imperdonable si en 2018 no volviéramos a conseguir resultados record, porque tenemos todo lo necesario para ello¿, ha explicado, apuntando a un objetivo a medio plazo del 15% en retorno de capital y de un ratio de eficiencia del 42% vía crecimiento de ingresos. La directiva adelantó además la pronta firma de un acuerdo de cajeros con la que la entidad ampliará su red considerablemente.

Respecto a los dividendos, ha descartado cambiar la política que la entidad mantiene desde hace años, de un pay out del 50%, apostando por realizar todos los pagos en 'cash'. 

Sin intención de nuevas compras

Como en los últimos trimestres, Dancausa ha insistido en que la entidad no tiene pensado participar en los movimientos de concentración, que a su juicio están prácticamente terminados, aunque sí se podrían ver nuevas operaciones transfronterizas. ¿Hemos pasado de 60 entidades a 12 supervisadas por el BCE, y no queda mucho espacio para más consolidaciones, aunque queden flecos. No veo ninguna fusión más, pero otra cosa son las fusiones transfronterizas, y no son descartables¿, explica. La consejera delegada de Bankinter descarta en este sentido el riesgo de oligopolio tras las últimas operaciones (Santander-Popular o Bankia-BMN), insistiendo en que hay que tener en cuenta a los nuevos entrantes como las Fintech o las entidades extranjeras.

El banco descarta también comprar alguna boutique de banca privada para completar su negocio de gestión de activos. Y Dancausa insiste: ¿La dimensión de Bankinter es una fortaleza. No estamos sobredimensionados en plantilla. Mientras que otras entidades se han visto obligadas a despedir, nosotros hemos podido centrarnos en nuestros proyectos de crecimiento¿. La directiva ha insistido en que, por otro lado, sí son lo suficientemente grandes para adaptar las capacidades de desarrollo y las cargas regulatorias ¿que para otros supone una carga prohibitiva¿.

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