El Opel Corsa seguirá fabricándose en la planta de Figueruelas, en Zaragoza. Los trabajadores han dado el sí al convenio colectivo pactado entre los sindicatos y la dirección de PSA. Una votación ajustada, en el que el nuevo convenio tan sólo ha alcanzado una diferencia de poco más de 800 votos a favor frente a quienes estaban en contra.
De este modo, se garantiza el futuro de los cerca de 5.400 trabajadores; aunque pone de relieve la división existente entre ellos acerca de las nuevas condiciones que tendrán los empleados actuales, pero sobre todo futuros.
El acuerdo aceptado hoy -y alcanzado el pasado lunes tras un fin de semana de reuniones maratonianas- garantiza que PSA comience la elaboración de un nuevo plan industrial para la planta, y que conllevaría la llegada del nuevo Opel Corsa en los próximos meses. El objetivo es conseguir que la planta funcione a pleno rendimiento, y consiga producir 478.000 unidades al año.
Según el convenio acordado entre empresa y sindicatos, se implantarán turnos flexibles en algunas de las líneas de fabricación. Además, habrá una congelación salarial en 2018; y un incremento del 50% del IPC durante los dos próximos años, que subirá al 60% en los dos siguientes. Además se reducen los pluses de festividad y nocturnidad, y en cinco años desaparecerán de calendarios especiales.
Con el Sí obtenido en el día de hoy se garantizan, además, cerca de 5.000 puestos de trabajo indirectos que trabajan para ella. Es decir, en total, unos 10.000 empleos que pendían de que se aceptaran las nuevas condiciones.