En una comunicación a la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV), la entidad que preside Josep Oliu, que se había marcado como objetivo alcanzar los 800 millones de beneficio en 2017, ha precisado que las ganancias aumentaron un 16,1 % a tipo constante y un 33,9 % sin tener en cuenta al banco británico TSB, integrado en 2015.
El margen de intereses del banco, que refleja la evolución del negocio típicamente bancario, se situó en 3.802,4 millones el año pasado, un 0,9 % menos (+ 1 % a tipo constante), si bien las comisiones netas crecieron un 6,5 % y sumaron 1.223,4 millones.
En cuanto al margen bruto, que mide la relación entre ingresos y costes, ascendió hasta 5.737,3 millones de euros, un 4,9 % más, a pesar de que los gastos de explotación aumentaron un 2,2 %, hasta los 2.723 millones, debido a los costes extraordinarios de tecnología relacionados con TSB.
El banco catalán, que en octubre acordó trasladar su sede social y fiscal a Alicante, aumentó un 53,9 % las provisiones para insolvencias y otros deterioros, al pasar de los 1.427,1 millones de 2016 a los 2.196,4 millones de 2017.
De esta forma, los beneficios extraordinarios generados por la entidad en 2017 con diversas operaciones corporativas han quedado neutralizados por este aumento en las dotaciones adicionales por importe bruto de unos 900 millones de euros.
El crédito vivo del grupo se incrementió un 4,6 % en términos interanuales comparables gracias al crecimiento en pymes y a la nueva producción de hipotecas, ha detallado el banco.
Asimismo, el Sabadell logró en 2017 aumentar los recursos de clientes tanto en balance (+ 2 %), hasta los 132.096 millones, como fuera de balance (+ 11,6 %), a 45.325 millones.
El consejo de administración del banco ha aprobado el reparto de un dividendo complementario en efectivo de 0,05 euros por acción, que se suma a los 0,02 euros ya repartidos, con lo que el porcentaje del beneficio que se destina a dividendos (payout) se sitúa en el 49 %, frente al 40 % de 2016.
La entidad cerró 2017 con 512.460 clientes nuevos, entre empresas y particulares, y la ratio de morosidad cayó un punto, del 6,14 al 5,14 %.
Respecto a las cuotas de mercado, el Sabadell ganó terreno en la operativa de TPVs -medios de cobro-, al pasar del 14,15 al 15,33 %, así como en crédito, al variar de un 11,17 % a un 11,59 %.
Sobre los niveles de capital, el Sabadell concluyó el año con una ratio Common Equity Tier 1 phase-in (la que incorpora lo que el regulador considera obligatorio) del 13,4 %, frente al 12 % de 2016, mientras que incluyendo futuros requerimientos legales ('fully loaded') esa ratio se situó en el 12,8 %.
Además, el Sabadell aumentó el año pasado un 9,1 % sus activos totales, que suman 221.348 millones, y un 3,9 % sus fondos propios, hasta 13.426 millones.
El banco, cuyo consejero delegado es Jaume Guardiola, prevé dar a conocer las líneas maestras de su plan director para el período 2018-2020 el próximo 23 de febrero en Londres.
Durante 2017, la entidad cerró diversas operaciones corporativas, como la venta de Sabadell United Bank, la operación de reaseguro de su cartera de riesgo-vida o la venta de su plataforma de gestión hotelera (Hi Partners).
Tambié acabó 2017 con un total de 2.473 oficinas, 294 menos que en 2016, y con 25.845 empleados, un centenar menos que el año anterior.