En concreto, esta operación forma parte del plan de desinversiones en activos no rentables o no estratégicos contemplados por el grupo hasta 2020, con el fin de obtener la máxima rentabilidad a la integración vertical de la compañía, incrementar el nivel de ocupación de sus fábricas y optimizar la planificación del suministro de materia prima.
Por otro lado, la compañía ha reforzado sus operaciones en Nicaragua con la adquisición de una granja acuícola y diversas inversiones para potenciar la producción de langostino, lo que le ha permitido incrementar en 7.000 toneladas su capacidad productiva en este país.
En total, el grupo procesa anualmente más de 40.000 toneladas de langostino vannamei, lo que le convierte en uno de los mayores productores mundiales de esta especie.
Los activos de Nueva Pescanova en Honduras (Novahonduras) incluían diversas sociedades dedicadas al cultivo de langostino y a su envasado. Desde principios de 2017, el grupo alquilaba estas instalaciones a un tercero, quien se ocupaba íntegramente de su gestión, por lo que su venta no repercutirá en la cifra de procesado de langostino. Además, el acuerdo con el nuevo propietario contempla un compromiso de suministro preferente para la firma española.
El cultivo, procesado y comercialización de langostino vannamei seguirá siendo clave en la estrategia de la compañía. Nueva Pescanova cuenta con aproximadamente 7.500 hectáreas de granjas de acuicultura entre Ecuador (Promarisco), Nicaragua (Camanica, que es la mayor empresa dedicada al cultivo de langostino del país y responsable de más del 50% de la producción y exportaciones de langostino de Nicaragua) y Guatemala (Novaguatemala).
Nueva Pescanova es una de las pocas compañías de alimentación que integra todas las actividades de la cadena de valor en el langostino vannamei: desde la producción de larvas selectas hasta la comercialización de productos elaborados. Las otras especies que cultiva actualmente el grupo son rodaballo en España y tilapia en Brasil.