El Vaticano informó en un comunicado de esta decisión, si bien no mencionó el nombre de los responsables ni la suma monetaria de la multa que deberán pagar.

Los medios locales, sin embargo, apuntan a que estas personas son el ex director general del IOR, Paolo Cipriani, y el vicedirector, Massimo Tulli.

Ambos dimitieron en julio de 2013 después del escándalo que acabó con el arresto de tres personas, entre ellas el prelado Nunzio Scarano, acusadas de fraude y corrupción en el marco de una investigación sobre supuestas irregularidades financieras en la entidad.

Las mismas informaciones sostienen que deberán pagar una multa de cerca de 47 millones de euros.

La Santa Sede se limitó a destacar que los dos exdirigentes sancionados por el Tribunal Civil vaticano han tenido una "larga trayectoria en el IOR" y señaló que han sido considerados "responsables de mala gestión" por lo que deberán indemnizar a la entidad "por los daños causados".

"La decisión del Tribunal es el resultado de la demanda civil iniciada por el IOR en septiembre de 2014 a través de una inspección exhaustiva de las inversiones financieras realizadas por el Instituto en el primer semestre de 2013", rezó el comunicado enviado a los medios.

"Esta decisión es un paso importante que demuestra el esfuerzo significativo" del IOR "en los últimos cuatro años para transformar el instituto", añadió.

El Vaticano subrayó "el compromiso constante del IOR con una gobernanza sólida, una transparencia en sus operaciones y la determinación en el cumplimiento con los mejores estándares internacionales".

Finalmente, confirmó la voluntad del IOR de "perseguir a través de procedimientos judiciales cualquier mala conducta que provoque daños, sin importar dónde y quién los haga".