En el anuncio de sus cuentas anuales, Société Générale confirmó que el fisco francés le ha reclamado los 2.200 millones de euros que había desgravado con motivo de las pérdidas de 4.900 millones del llamado "caso Kerviel".

Como había avanzado la prensa francesa el mes pasado, la administración fiscal estima que la entidad no puede pretender esa exoneración porque en su último veredicto la justicia le consideró "parcialmente responsable" de las faltas cometidas por el operador Jérôme Kerviel.

El banco indicó que ese asunto no tiene incidencia en sus cuentas de 2017 y que tendrá que ser confirmada por una inspección fiscal en los próximos años.

El producto neto bancario de la entidad bajó un 5,3 % hasta los 23.954 millones de euros, ientras que el resultado de explotación bajó un 25,4 % hasta los 4.767 millones.

Société Générale ya había previsto unas cargas excepcionales en sus cuentas del cuarto trimestre sobre la reestructuración de sus servicios bancarios para adaptarlos a la era digital.

A ello se suman los 456 millones adicionales incluidos en sus cuentas por los gastos extraordinarios ligados a la reforma fiscal en Estados Unidos.

El grupo prevé el pago de 2,2 euros por acción como dividendo del año 2017, el mismo que en 2016.

Además, espera incrementar sus recortes en 1.100 millones de euros dentro del plan de estratégico hasta 2020.