La entidad pondrá en marcha un ERE en el marco de la integración de sus servicios centrales con los de Popular tras la adquisición del banco el pasado mes de junio. Los trabajadores de ambas entidades tuvieron de plazo hasta el pasado 31 de enero para presentar su solicitud de adhesión voluntaria al ERE.
El 25% de la plantilla
El expediente colectivo, cuya negociación finalizó el pasado diciembre, implica la salida de 1.100 empleados, el 3,1% de la plantilla conjunta de Popular y la división española de Santander, que asciende a unos 35.000 trabajadores.
La integración de los servicios centrales también incluye la recolocación de 597 empleados en otras empresas del Grupo Santander y el acoplamiento de otros 100 trabajadores en la red comercial de ambas entidades.
Así, sumando salidas y recolocaciones, la integración supondrá aligerar en un 25%, aproximadamente, la plantilla de los servicios centrales de Popular y Santander España, que se comenzará a trasladarse al nuevo edificio de Popular, ubicado en la calle Juan Ignacio Luca de Tena de Madrid, a partir de marzo.