Según la carta de despido, al directivo le corresponde una indemnización de siete días por año trabajado con un límite de seis mensualidades, lo que suponen 88.625 euros, según publica este martes 'La Vanguardia'.
Sin embargo, la administración concursal solicitará "de forma inminente" al juez mercantil 7 de Barcelona que suspenda el pago de esta indemnización hasta que dictamine si el concurso de Unipost fue culpable o fortuito.
Raventós tenía una retribución mensual de 36.000 euros, una cantidad que incluía la parte proporcional de las pagas extras, que las tenía prorrateadas.
Unipost pidió el concurso voluntario de acreedores el 12 de julio del año pasado por insolvencia, con unos activos de 40,6 millones de euros frente unos pasivos de 47,4 millones de euros.
Tras la apertura de la fase de liquidación la semana pasada, CC.OO. anunció que llevaría a Raventós ante los tribunales al considerarlo el único responsable de la liquidación y el cierre de la empresa, y acusó de "malas prácticas" de la dirección de Unipost y de no haber planteado un plan estratégico real y haber cargado la viabilidad de la empresa en los recortes continuados.