"La preocupación del Ministerio de Fomento no es la nacionalidad, es que se cumpla la legalidad", indicó el secretario de Estado de Infraestructuras, Julio Gómez-Pomar.
En su intervención en un foro organizado por 'Vozpopuli' y Executive Forum, el 'número dos ' de Fomento indicó que, en términos generales, "cualquier proceso de adquisición de una empresa por otra es bueno para la economía por la generación de valor que supone".
En el caso concreto de la puja por Abertis, recordó que el "cambio de manos" de una compañía gestora de concesiones de autopistas requiere, según la Ley de Concesiones y los pliegos de los contratos, la autorización del Gobierno.
Gómez-Pomar recordó que en la actualidad las dos empresas que compiten por el grupo de autopistas, Atlantia y Hochtief (ACS) ya cuentan con la autorización, si bien una de ellas lo solicitó tras el requerimiento que el Gobierno realizó a la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV) para que se lo exigiera a los oferentes.
En la actualidad, el proceso de OPAs está pendiente de que el supervisor del mercado autorice la oferta de la filial de ACS, en ese momento comenzará el plazo de aceptación de las dos propuestas y se abrirá la puerta a que los oferentes realicen mejoras en las mismas.