Estas autopistas representan casi las dos terceras partes, el 64%, del total de 1.559 kilómetros de vías de pago que la compañía gestiona en España, el 60% del total de la red del país, el que figura así como principal gestor de autopistas.
La compañía afronta además el vencimiento de estas vías mientras actualmente está pendiente de las negociaciones abiertas entre ACS y Atlantia para hacerse con su control conjuntamente.
Durante la junta de accionistas del grupo, su nuevo primer ejecutivo, José Aljaro, indicó que la empresa cuenta sendos fondos de provisiones para atender los eventuales desperfectos de las vías que vencen con el fin de devolverlas al Estado "en perfecto estado".
Se trata de un fondo 136 millones de euros para atender pequeños desperfectos y otro de 146 millones para el caso de tener que atender grandes reparaciones por fallos estructurales.
Además de en España, Abertis explota autopistas en Francia, Italia, India, Brasil, Chile, Argentina y Puerto Rico, mercados donde en total suma 8.600 kilómetros de vías de pago.
En los próximos años también venden una concesión de Brasil y las de Argentina, si bien el grupo ya ha pactado ampliar los plazos de explotación a cambio de concesiones.
CALENDARIO DE VENCIMIENTOS
En el caso de España, Aumar es la primera concesión que vence y que Abertis deberá devolver al Estado en 2019. Se trata de la sociedad concesionaria que gestiona los 468 kilómetros de vías de pago que suman el tramo de la AP-7 entre Tarragona y Alicante y el de la AP-4 entre Sevilla y Cádiz.
En 2021 concluye el plazo de concesión de Acesa, que explota 479 kilómetros de pago en Cataluña (la AP-7 La Jonquera-Barcelona y Barcelona-Tarragona, la AP-7 Montmeló-El Papiol y la AP-2 Zaragoza-Mediterráneo).
En ese año, el grupo también devolverá al Estado Invicat, concesionaria encargada de los 66 kilómetros que suman la C-31/C-32 Montgat-Palafolls y la C-33 Barcelona-Granollers.
"DEBATE INAPLAZABLE"
En este sentido, durante la junta de accionistas de Abertis, su presidente, Salvador Alemany, instó a aprovechar el debate que el Gobierno pretende abrir en torno a las autopistas de peaje, precisamente ante el vencimiento la concesión de las primeras que se construyeron, para plantear extender el cobro de peaje a todas la red de autovías, tal como indican las directivas de la UE y han realizado otros países europeos.
"Nos encontramos ante el momento inaplazable en que hay que afrontar un debate maduro para definir un modelo viable, sostenible y socialmente equitativo para la financiación, el mantenimiento y la gestión de las infraestructuras que el país necesita", argumentó Alemany.
Para el presidente de Abertis, la "solución" debería pasar por extender de forma "armónica y equitativa" el pago por uso "a toda la red de autovías de alta capacidad" del país.
Asimismo, transmitió la "voluntad" del grupo para "colaborar con las administraciones públicas en la búsqueda de propuestas que mejor satisfagan las necesidades de la sociedad y formar así parte de la solución".