En cumplimiento de los compromisos asumidos con el BIS, Caruana no asumirá la condición de consejero de BBVA hasta el próximo 1 de junio de 2018.
Asimismo, el consejo de BBVA propondrá el nombramiento de otros dos consejeros independientes. Se trata de Ana Peralta Moreno, actualmente consejera de Deutsche Bank en España desde 2014 y senior advisor en Oliver Wyman Financial Services desde 2012, y de Jan Verplancke, exresponsable de Sistemas de Tecnologías de la Información del banco británico Standard Chartered.
Con la incorporación de los tres nuevos consejeros, BBVA ha destacado que fortalecerá las capacidades financieras y tecnológicas del consejo de administración, contará con una mayoría de consejeros independientes (8) y completará la composición hasta 15 miembros.
La entidad subraya que con estas propuestas favorece la diversidad de experiencias, conocimientos, competencias y género en su consejo. Así, incorpora consejeros con un acusado perfil internacional y una profunda especialización en capacidades financieras y tecnológicas que se estiman de máxima relevancia para el Grupo, y avanza en la consecución del objetivo de tener en 2020 al menos un 30% de consejeras.
Los nombramientos están sujetos a la verificación por parte del BCE de los requisitos regulatorios de idoneidad para el ejercicio del cargo de consejero.
Los accionistas de BBVA votarán también la reelección de los consejeros José Miguel Andrés Torrecillas, Belén Garijo López, Juan Pi Llorens y José Maldonado Ramos.
Caruana fue director general del BIS entre abril de 2009 y el 30 de noviembre de 2017. Previamente, dirigió el departamento de Mercados Monetarios y de Capital del FMI.
Nacido en 1952, fue gobernador del Banco de España entre los años 2000 y 2006, y en ese periodo formó parte del consejo de gobierno del Banco Central Europeo. Ha sido también presidente del comité de Supervisión Bancaria de Basilea entre los años 2003 y 2006 y miembro del Fondo de Estabilidad Financiera desde 2003.
El orden del día de la junta recoge, además de las propuestas de nombramiento antes citadas, la propuesta de aprobación de las cuentas anuales de BBVA correspondientes a 2017, la autorización para que la sociedad pueda adquirir acciones propias, la votación consultiva del informe de remuneraciones de los consejeros y la aprobación de un nivel máximo de retribución variable de hasta el 200% del componente fijo de la remuneración total para un determinado colectivo de empleados cuyas actividades profesionales "inciden de manera significativa en el perfil de riesgo del grupo".