Así lo ha avanzado el CEO de Citi, Mike Corbat, en un correo interno a los empleados, donde señala que esta nueva política aprobada por la entidad promueve la adopción de las mejores prácticas actuales con respecto a la venta de armas de fuego.
Las medidas adoptadas, según Corbat, están diseñadas para respetar los derechos de los propietarios de armas considerados "responsables", al tiempo que ayudará a mantener las armas de fuego fuera de las manos equivocadas. Esta política se aplicará en toda la empresa, incluidos los clientes de pequeñas empresas, comerciales y clientes institucionales, así como a los titulares de tarjetas de crédito, ya sean de titularidad compartida o privada.
Citi requerirá que los nuevos clientes o socios se adhieran a estas prácticas, de modo que no vendan armas de fuego a quien no tenga el permiso correspondiente y no se hayan comprobado sus antecedentes, que restrinjan la venta de armas de fuego a menores de 21 años años de edad y que no vendan armas de asalto.
"A los clientes actuales, está claro que les importan estos temas y creemos que podemos lograr progresos significativos juntos. Ya hemos empezado a colaborar con ellos con la esperanza de que adopten estas mejores prácticas en los próximos meses. Si optan por no hacerlo, respetaremos su decisión y trabajaremos con ellos para hacer que su negocio se aleje de Citi", afirma Corbat.
"Como ávido amante de la naturaleza y dueño responsable de armas, sé que algunos encontrarán que nuestra política es demasiado estricta, mientras que a otros les resultará demasiado indulgente. No tenemos la solución perfecta para apoyar a nuestra Constitución y mantener seguros a nuestros hijos y nietos. Las mejores prácticas van a continuar cambiando, y entendemos las limitaciones de nuestros esfuerzos. Pero no debemos permitir que eso nos impida hacer nuestra parte", concluye el consejero delegado.