Gran parte del descenso estuvo ligado a los datos del tercer trimestre, que cerró con pérdidas por provisiones fiscales ligadas a la reforma tributaria impulsada por la Casa Blanca a finales del año pasado.

En los tres trimestres que cerró el 28 de febrero pasado, Nike tuvo unos ingresos de 26.608 millones de dólares, un 4 % más que en el período del ejercicio fiscal anterior.

El beneficio por acción acumulado en esos nueve meses alcanzó los 48 centavos de dólar, frente a los 1,91 dólares que tuvo en los nueve meses del ejercicio fiscal anterior.

Respecto al trimestre más reciente, el período que más seguía hoy Wall Street, Nike registró unas pérdidas de 921 millones de dólares, frente a la ganancia de 1.181 millones de dólares del tercer trimestre del ejercicio fiscal de 2017.

Nike cerró el trimestre con unas pérdidas de 57 centavos por acción, frente a la ganancia de 68 centavos del mismo período del año pasado. En esos tres meses el impacto de la reforma fiscal alcanzó 1,25 dólares por acción.

La firma deportiva anunció que en el trimestre cerrado en febrero pasado tuvo un aumento del 7 por ciento en sus ingresos, hasta 8.984 millones de dólares, por encima de los 8.800 millones que habían calculado los analistas.

Los datos fueron anunciados al cierre de Wall Street, pero en las operaciones electrónicas posteriores los títulos de Nike subían un 4,9 %.