Ya no es suficiente, aunque los resultados sigan acompañando. Grupo Dulcesol es, desde hace 60 años, la encargada de copar los lineales de los supermercados de pastelería y bollería industrial. Pero ya no se puede vivir solo de eso. Ahora, con dos nuevas marcas, trata de entrar en los hogares de unos consumidores muy diferentes a sus clientes habituales. Lo 'eco' es un filón.
Desde que hace 10 años dijera 'no' a Mercadona para ser su interproveedor en exclusiva, el grupo ha seguido reinventándose y poniendo todos sus esfuerzos en la expansión internacional; hoy, tiene presencia en 45 países. Los resultados acompañan a su estrategia. No en vano, Grupo Dulcesol cerró 2017 con una facturación global de 325 millones de euros, un 2% más que en 2016, y una producción de 144.400 toneladas. El negocio internacional les supuso 53,7 millones de euros en ventas, que representan casi el 16,5% del negocio del grupo.
Para su consejero delegado, Rafael Juan, las ventas se han incrementado en 2017 debido a dos factores, "que son los pilares de nuestra estrategia de futuro", dijo: la internacionalización y la diversificación.
Esto último apunta directamente a las dos marcas con las que el grupo está tratando de entrar en las cestas de nuevos consumidores. Durante 2017, la empresa realizó inversiones por valor de más de 28,4 millones de euros, tanto para incorporar nueva maquinaria como para trabajar en productos "con mejor perfil nutricional".
Cremas ecológicas y superalimentos
Un viraje que ha tenido lugar durante los dos últimos ejercicios, cuando Grupo Dulcesol ha lanzado las marcas con las que espera diversificar su negocio. El primer paso lo dio de forma tímida en 2016, cuando incorporó, dentro de su gama de bollería, los productos Dulcesol Innova; una colección de cinco productos que contienen la microalga Chlorella, "uno de los famosos superalimentos", explican desde la compañía.
Ahora, lo nuevo en el grupo rompe totalmente con su negocio tradicional. En su catálogo, Beplus, una gama de batidos "bioactivos" (antioxidante, energizante, detox...), y Natur Crem, cremas ecológicas listas para consumir.
"Con esta incorporación buscamos ampliar nuestra gama de productos para llegar a nuevos hogares y perfiles de consumidores. Su lanzamiento tiene lugar en el marco de nuestra estrategia de diversificación y de la apuesta por la alimentación bio", apuntan desde el grupo a este periódico. Un plan que pasa por estar presente en todos los supermercados, objetivo que esperan conseguir este 2018. "A día de hoy estamos en proceso de implantación y por ello negociando con las cadenas de distribución", reseñan.
Todo ello sin dejar a un lado que es la pastelería y la bollería lo que hace crecer al grupo. "En 2017 hemos sido una año más la primera empresa en volumen de este sector y hemos seguido creciendo a buen ritmo en el mercado exterior", presumen. No obstante, apuestan por renovarse. Para ello, han dedicado algo más de tres millones de euros en los últimos tres años años a I+D: "Para nosotros es un eje estratégico para la diferenciación y el liderazgo", aseguran.
Un mercado, el de lo 'eco', en el que tanto las empresas como las cadenas de distribución luchan por hacerse hueco ante una demanda creciente. ¿Se traducirá en las ventas?