La emisión, que ha tenido una demanda cercana a los 2.400 millones de euros, prevé una opción de cancelación por parte del emisor en el séptimo año y servirá para que CaixaBank refuerce el capital de segunda categoría, conocido como Tier 2.

El precio ha fijado en 168 puntos básicos sobre el midswap, el índice de referencia para este tipo de operaciones.

Se trata de la tercera emisión de deuda subordinada Tier 2 que realiza CaixaBank en los últimos catorce meses, aunque en esta ocasión ha abaratado prácticamente a la mitad el coste de financiación respecto a la primera colocación, que realizó en febrero de 2017 con un plazo a diez años y un precio de 335 puntos sobre el midswap.

En lo que va de año el banco que preside Jordi Gual y cuyo consejero delegado es Gonzalo Gortázar ha llevado a cabo cuatro emisiones públicas, después de que en enero colocara 1.375 millones en cédulas hipotecarias y 1.000 millones en deuda sénior y en marzo hizo una emisión de preferentes eventualmente convertibles en acciones (CoCos, en el argot financiero) por valor de 1.250 millones.

Con esta emisión, la de mayor vencimiento de deuda subordinada española bajo la nueva regulación bancaria, CaixaBank refuerza sus ratios de capital regulatorio aprovechando las buenas condiciones del mercado.