Los ingresos de Orange España alcanzaron los 1.310 millones de euros durante el primer trimestre de 2018, un 4,3% más que en el mismo periodo del año anterior, según se desprende de las cuentas presentadas por la operadora francesa este jueves.

Según ha explicado la compañía, este crecimiento se ha visto impulsado por la mejora 7% en los ingresos en los servicios convergentes, hasta los 526 millones de euros, con una menor aportación de los servicios solo-móvil, que se reducen un 3,2% hasta 299 millones de euros, y solo fijo, que aumentan un 0,9% hasta 122 millones.

Orange ha finalizado el trimestre con un total de 20.218.000 clientes, de los cuales 16.079.000 son de telefonía móvil y 4.139.000 de banda ancha fija. Más del 85% de los clientes de este último segmento –3.138.000-, ya tiene servicios convergentes.

Peso de la fibra y la televisión

Con todo, una de las claves ha estado en el crecimiento de los clientes de banda ancha y de televisión. Orange mantiene cerca de 9,5 millones de clientes 4G y ha finalizado el primer trimestre del año con 2.428.000 clientes de fibra, lo que se traduce en un crecimiento del 34%.

Esto supone 169.000 altas netas durante este periodo y que más de la mitad de los clientes de banda ancha de la compañía hayan sido migrados a servicios de fibra. La fibra de Orange llega ya a 12,2 millones de hogares, con un aumento del 22%, comparando con el primer trimestre del año anterior. 

Orange TV alcanzó durante los primeros tres meses del año los 641.000 abonados, un crecimiento de la base de clientes del 20% respecto al año anterior, con 16.000 altas netas en el primer trimestre de 2018.

Resultados globales

En todos los mercados en los que opera, Orange registró unos ingresos de 10.082 millones de euros, un crecimiento del 2% respecto al primer trimestre del año pasado. De esta manera, el Ebitda ajustado (resultados operativos brutos) creció hasta los  2.605 millones, una mejora del 3,8%.