Las buenas noticias para Tolga Öncü, hasta hace pocas semanas director general de Ikea Ibérica, pasan porque ha sido elegido para un puestazo en la matriz del grupo, dependiendo directamente del CEO, Jesper Brodin, y dejando vacante la posición en España.
Las malas noticias pasan porque, al poco de volver a Suecia, se ha encontrado con un 'marrón' importante: anunciar el despido de 150 personas, principalmente 110 trabajadores de la unidad de apoyo global de Suecia, pero también en Países Bajos y Bélgica.
"Ésta no ha sido una decisión simple porque nuestros empleados son una parte importante de nuestro éxito", señaló Öncü en un comunicado. "Manejaremos esta situación de acuerdo con nuestros valores y apoyaremos a todos los empleados afectados. Estamos en estrecho diálogo con el sindicato para encontrar la mejor solución para cada empleado", indicó Öncü en un comunicado.
Fuentes de la compañía confirmaron a EL ESPAÑOL el cambio de puesto y admitieron que la posición está aún vacante.
El reto de Maeztu
Otro cambio clave en la compañía es la elección de Juvencio Maeztu como director financiero y co-CEO. Maeztu, que dirigió la expansión de la empresa en India desde 2012, ya formaba parte de su comité de dirección mundial.
En su primera entrevista tras el nombramiento, concedida a Reuters, Maeztu admitió el reto que supone el crecimiento de jugadores globales como Amazon y Flipkart, nativos del comercio electrónico. "Lo que es más importante que nunca es estar tan cerca como sea posible del consumidor, que tiene mucho más poder que antes", subrayó.
La lista del poder español en la compañía sueca la completa Belén Frau, que lleva meses liderando Italia, uno de los mercados claves del grupo.