El acuerdo, que consiste en la fabricación, producción y montaje de piezas para vehículos especializados y cuyo importe no ha especificado, "deja la puerta abierta" a la extensión del alcance de este programa a otros vehículos, según ha informado hoy Carbures en un comunicado.

Según la compañía, este contrato abre para Carbures un nuevo nicho de mercado (además del de piezas de avión, coche y trenes) que le permite diversificar su modelo de negocio, su capacidad industrial y "seguir creciendo".

Las piezas serán fabricadas mediante el método de infusión de la tela de composite con el objetivo de aumentar su calidad final; al mismo tiempo, sus ingenieros también se ocuparán del diseño y fabricación de los moldes que posteriormente servirán para la fabricación de las partes.

El presidente ejecutivo de la empresa, Rafael Contreras, ha subrayado que el acuerdo con Textron "supone para Carbures un paso adelante en su capacidad tecnológico-industrial y la entrada en un nuevo mercado, como es el de los vehículos especializados, como los que están incluidos en el portfolio de Textron".

Carbures entra a formar parte así de la cadena de proveedores de Textron, una de las compañías multisectoriales "más conocidas del mundo" que engloba marcas como Bell, Cessna, Beechcraft, EZ-GO y Jacobsen, entre otras.

Para la compañía es importante que Textron -que cuenta con actividades en el sector de la aviación, de los helicópteros y de otras industrias (con productos y vehículos especializados)- haya confiado en Carbures como proveedor para "acometer su plan estratégico de reducción del peso de sus vehículos para optimizar su rendimiento y consumo de combustible".

Textron facturó en 2017 un total de 14.198 millones de dólares (11.971 millones de euros), de los que el 14 % provino de Europa y el 9 % de Asia Pacífico, dos regiones en las que Carbures dispone de fábricas y plantas de ingeniería que le permite tener una "posición de ventaja" respecto a otras empresas para consolidarse como un "proveedor de referencia", ha subrayado.