OHL registró una pérdida neta de 144,9 millones de euros en el primer trimestre del año, con lo que mantiene los 'números rojos' con que cerró los dos pasados ejercicios, según informó la empresa.
Las cuentas de la compañía del grupo Villar Mir recogen un impacto de 140,3 millones de euros derivados de la resolución desfavorable de un conflicto surgido en un proyecto en Guatemala, del tipo de cambio y de la variación de las coberturas de tipo de cambio contratadas en el marco de la venta de la filial de concesiones.
Esta transacción, la mayor realizada en la historia de la compañía dado que se cerró por 2.235 millones de euros, no se refleja aún en las cuentas trimestrales puesto que se materializó el pasado mes de abril.
Ebitda negativo de 36,4 millones
OHL indica que sus pérdidas a marzo se reducen a 4,6 millones de euros en caso de descontar los referidos efectos adversos, según notificó a la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV).
No obstante, el mencionado contencioso surgido en Guatemala lastró también el beneficio bruto de explotación (Ebitda) de la compañía, que a cierre de marzo se situó en un importe negativo de 36,4 millones.
De su lado, la cifra de negocio disminuyó un 7,9% entre los pasados meses de enero y marzo, hasta 712,5 millones de euros, consecuencia de la menor actividad tanto de construcción como de construcción industrial.
La deuda neta se dispara
OHL logró del exterior el 75,4% de sus ingresos del trimestre. Estados Unidos y Canadá se mantienen como principales mercados de la compañía, al aportar el 31,3% del total, por delante de España (24,6%) y México (8,7%).
En el capítulo financiero, OHL disparó un 27,6% su deuda neta con recurso en el trimestre en comparación a finales de 2017, hasta situarse en 1.204 millones de euros, por un mayor consumo de caja.
OHL también aprobó su nuevo plan de negocio 2018-2020 que tiene como principales objetivos liquidar deuda, recortar gastos y recuperar la rentabilidad, según adelantó la compañía.
Nuevo plan de negocio
La empresa del grupo Villar Mir busca con el plan adaptarse a la nueva dimensión, con la que vuelve a ser una empresa constructora, tras la reciente venta de su filial de concesiones.
Para lograr ese objetivo, en virtud del plan, OHL centrará su negocio de la construcción y la promoción de nuevas concesiones en los tres mercados estratégicos tradicionales de la empresa, Estados Unidos, Latinoamérica y Europa.
En paralelo, el plan impondrá una "fuerte reducción" de gastos de estructura de la empresa "para adaptarse a las nuevas necesidades". En este sentido, OHL acaba de presentar un ERE para 196 trabajadores de las oficinas centrales de estructura en Madrid, casi la mitad de la plantilla total de esta área.