La dirección de Duro Felguera conocía desde el pasado jueves que José Carlos Cuevas era la persona que había enviado un pendrive a la fiscalía con información sensible sobre los pagos a funcionarios chavistas en Venezuela. Así lo confirman fuentes cercanas a la compañía, quienes explican que -por ahora- no se ha tomado ninguna medida contra el todavía director financiero de la compañía.
La noticia llegaba directamente al consejo de administración de Duro Felguera a través de una carta dirigida al consejo de administración enviada por uno de sus consejeros: Ángel del Valle. Un escrito enviado vía burofax que se entregaba el jueves a primera hora de la mañana en las oficinas de Duro Felguera. Sin embargo, desde la compañía niegan haber recibido tal documentación.
El texto del ahora consejero daba cuenta de que había tenido conocimiento de la actitud de Cuevas, y solicitaba al equipo que dirige Acacio Rodríguez que tomara medidas por la “deslealtad” que se producía contra la compañía.
Contenido del pen drive
Y es que esa filtración de un pendrive a la fiscalía derivó en la intervención de la policía judicial en su sede la pasada semana. Se buscaban los correos electrónicos contenidos en la memoria recibida con el objetivo de cotejar la información con los soportes reales.
No hay constancia todavía del contenido de esos emails, que están relacionados con el presunto pago de sobornos a funcionarios chavistas. Lo que no está claro todavía es si, como todo apunta, se trata de los correos recabados por el equipo jurídico de Duro Felguera en 2015 cuando comenzaron las investigaciones. Algunas fuentes apuntan a que podría tratarse de otros correos electrónicos, también relacionados con Venezuela, pero más en la línea de investigación que inició en aquel entonces la Agencia Tributaria para comprobar la veracidad de los trabajos y los pagos efectuados.
Hablamos de un importe cercano a los 90 millones de euros, que se abonaron entre 2008 y 2013. Cerca de 54 millones fueron a manos de Terca, sociedad de Técnicas Reunidas que era la encargada de asesorar y proveer a Duro Felguera en la construcción de la central de ciclo combinado Termocentro en Venezuela.
Las facturas de Venezuela
Ese primer contrato, firmado en 2008, se subrogó en un tercero el 12 de abril de 2011. En él se justifica el traspaso de los trabajos que venía efectuando Terca a la sociedad Ingeniería Gestión de Proyectos de Energía, propiedad del exvicepresidente de energía venezolano, Nervis Villalobos. Una sociedad que entre 2011 y 2013 percibió cerca de 28 millones de euros en siete facturas diferentes.
Unas facturas que fueron abonadas por parte de Duro Felguera en concepto de “asesoramiento y actividades” según se recoge en los contratos firmados con la compañía. De todos los abonos facturados a Ingespre por parte de Duro Felguera, siete en total, cinco fueron abonadas en una cuenta de la compañía en Societe Generale y otras dos en el Banco Madrid, en la cuenta terminada en 5418 a nombre de Ingespre, en donde se ingresaron cerca de 3,7 millones de euros.
Esos pagos se efectuaron, según documentación a la que ha tenido acceso EL ESPAÑOL, el tres de noviembre de 201, correspondientes a dos facturas del 19 de octubre de 2011 y del 20 de octubre de 2011. Fueron esos abonos los que hicieron saltar las alarmas cuando comenzó la investigación judicial tras la caída del Banco Madrid en marzo de 2015 cuando fue intervenido por el Banco de España.
A partir de ahí la fiscalía y la Audiencia Nacional abrieron una serie de investigaciones en torno a los pagos que efectuaba Duro Felguera a Ingespre que es propiedad de Nervis Villalobos, que fue contratado para asesorar, pero también buscar oportunidades en la región para Duro Felguera.