La operación, estimada en 995 millones de euros, tiene su éxito asegurado, dado que cuenta con la aceptación del 50,3% del capital que suman los tres accionistas de referencia de Saeta.
Brookfield ya informó a la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV) el pasado día 9 de que ACS y GIP se habían adherido a la oferta con el 24,1% que cada uno de ellos tiene en la empresa, y también Mutua Madrileña con su 1,754%.
El grupo que preside Florentino Pérez ingresará 240 millones de euros con esta venta, con la que hace así caja mientras está embarcado en la toma de control de Abertis junto con Atlantia.
ACS saldrá así de Saeta, la compañía que fundó hace cuatro años para segregar todos sus activos de renovables y que, posteriormente, en 2015, sacó Bolsa en lo que supuso el primer 'yield' que cotizó en Europa.
Por su parte, Brookfield al garantizarse el éxito de la operación, se asegura su "primera inversión relevante" en Europa, a la que además contempla como una "plataforma" para su crecimiento en el continente.
En su OPA, Brookfield ha propuesto el pago de 12,20 euros por cada acción de Saeta, una contraprestación que el consejo de la firma consideró positiva.
Al cierre de 2017, Saeta contaba con una cartera de activos de renovables, entre parques eólicos y termosolares, de 1.028 megavatios (MW), después de que el pasado año emprendiera su internacionalización con la compra de activos en Uruguay y Portugal. La firma soporta un endeudamiento neto de 1.424 millones de euros, equivalente a 5,5 veces su Ebitda.