Visa recupera la normalidad y descarta un ataque informático a sus sistemas
- La compañía reconocía esta tarde sufrir problemas para efectuar pagos en Reino Unido y otros países europeos.
- En un comunicado emitido esta madrugada, Visa pide disculpas a sus clientes.
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Visa da por solucionada la incidencia que ha provocado el caos en los pagos con tarjeta en el Reino Unido y algunos países europeos. La compañía asegura que ha tenido "un fallo de hardware" sin que se conozcan por ahora los motivos que lo han producido.
Según el comunicado emitido esta noche la incidencia ha sido resulta y "los titulares de tarjetas Visa ya pueden usarlas ya que estamos operando a niveles casi normales". Además ha descartado que haya existido algún ataque informático contra sus sistemas: "no tenemos ninguna razón para creer que se haya producido ningún acceso no autorizado o evento malicioso", afirman.
Todo después de que a media tarde de este viernes algunos usuarios, sobre todo del Reino Unido, comenzaran a tener problemas para efectuar los pagos. Comenzaba entonces una espiral de quejas a través de la Red que obligaba a Visa a confirmar lo que era un secreto a voces: el sistema de pagos no funcionaba.
"Una incidencia" que ha hecho que la empresa se haya quedado "por debajo del objetivo de garantizar que todas las tarjetas Visa funcionen de manera fiable las 24 horas del día, los 365 días del año".
Una incidencia que llevaba, por ejemplo, a entidades como el Banco de Irlanda a mostrar su apoyo a la compañía de tarjetas para intentar solventar dichos problemas. Paymentsense, que ofrece servicios comerciales a más de 60.000 negocios independientes en el Reino Unido e Irlanda, tuiteó: "Visa nos ha informado que tienen problemas con su servicio de autorización desde las 14:36 lo que puede ocasionar fallos intermitentes de autorización y tiempo de espera".
Según ha podido saber EL ESPAÑOL en España no se han registrado incidencias, aunque la firma ha estado monitorizando los sistemas para evitar cualquier problema. Tampoco los principales bancos españoles han notado una mayor incidencia en sus servicios.