Red Eléctrica Internacional, a través de su filial Transmisora Eléctrica del Sur 2, ha puesto en servicio la línea eléctrica de 220 kilovoltios (kV) de Azángaro-Juliaca-Puno, situada en el Sur de Perú, de 115 kilómetros de longitud y cuya inversión estimada por el Gobierno peruano ha ascendido a 70 millones de dólares (unos 60 millones de euros), informó la compañía.

Con la entrada en servicio de este proyecto, Red Eléctrica gestiona 1.314 kilómetros de circuitos en el país andino, posicionándose de forma preferencial para la futura interconexión entre Chile y Perú.

Además, la entrada en operación comercial de esta línea el pasado 8 de junio consolida al grupo como una de las mayores empresas de transporte de energía eléctrica de Perú, y refuerza su presencia en el Sur del país, donde cuenta en la actualidad con tres concesiones en explotación y dos en fase de construcción.

EXPANSIÓN INTERNACIONAL

Este proyecto se enmarca dentro de los planes de expansión internacional del grupo presidido por José Folgado y refuerza el papel de Red Eléctrica Internacional como transportista de electricidad en el Sur de Perú, donde está presente desde 1999.

La compañía es propietaria de la totalidad de Red Eléctrica del Sur (Redesur), empresa encargada de gestionar el transporte de energía eléctrica en el Sur del país (principalmente de las regiones de Arequipa, Moquegua, Tacna y Puno), y de Red Eléctrica Andina (REA), empresa especializada en el mantenimiento eléctrico en media y alta tensión, sistemas de protección y sistemas de telecomunicaciones, así como en el asesoramiento técnico a proyectos de energía.

Redesur es propietaria al 100% de Transmisora Eléctrica del Sur (línea de 220 kV Tintaya-Socabaya y línea de 138 kV Tintaya Nueva-Tintaya y subestaciones asociadas); Transmisora Eléctrica del Sur 2 (línea de 220 kV Azángaro-Juliaca-Puno); Transmisora Eléctrica del Sur 3 (línea del 220 kV Montalvo-Los Héroes 220 kV), y Transmisora Eléctrica de Sur 4 (línea de 220 kV Tintaya-Azángaro).

Estas dos últimas infraestructuras se encuentran actualmente en construcción con una previsión de puesta en servicio en 2019 y 2021, respectivamente, y cuentan con una inversión conjunta de unos 90 millones de dólares (unos 80 millones de euros).