Los últimos datos del Banco de España (BdE) así lo reflejan. En abril, las nuevas operaciones registraron aumentos en los intereses exigidos en la mayoría de los créditos. Sobresale, eso sí, el segmento 'premium' del momento, el del crédito al consumo, que es el favorito del sector por estar en pleno 'boom' y por ser el que deja unos intereses más lustrosos.

En abril, el tipo medio ponderado de las nuevas operaciones de crédito al consumo se situó en el 7,82%, frente al 7,24% de diciembre de 2017. Se trata del interés más alto desde marzo de 2017 y refleja un encarecimiento del 8% en lo que va de año.

Por tramos, el incremento más notable se observa en las nuevas operaciones a más largo plazo. Siempre con las cifras del BdE, el crédito al consumio a plazos mayores a cinco años alcanza ya un interés del 8,59%, por encima del 7,89% de diciembre y un interés que no se veía desde el otoño de 2015.

En los créditos al consumo a un año, el interés también repunta del 3,33% al 3,59% en los cuatro primeros meses de 2018. Por el contrario, para las operaciones de entre uno y cinco años, el interés baja del 8,49% al 8,28%.

ACTITUD VIGILANTE

El crédito al consumo se encuentra en plena ebullición, demandado por unos hogares que, superado lo peor de la crisis, están incrementando su consumo y ofertado por unos bancos que ven en él un recurso clave en un contexto en el que los tipos de interés oficiales se encuentran en el 0%, con los de la facilidad de depósito, fundamentales para el negocio bancario y para referencias como el euríbor, en el -0,40%.

Juntados así el hambre con las ganas de comer, este segmento no deja de engordar. "El crecimiento del crédito a hogares no destinado a vivienda viene determinado por el fuerte incremento experimentado por el crédito al consumo, cuyas tasas de crecimiento interanual se mantuvieron por encima del 15% a lo largo de todo el año 2017", destacaba el BdE en el Informe de Estabilidad Financiera de mayo.

Pero no se limitaba a recoger datos y tendencias. En ese Informe, la entidad gobernada desde la semana pasada por Pablo Hernández de Cos alertaba al sector del peligro que puede derivarse del 'boom' del crédito al consumo por mucha necesidad que las entidades tengan de generar márgenes y rentabilidad. "Este tipo de crédito es el segmento de negocio con los tipos de interés más elevados, y dado el entorno de bajos tipos de interés en el que se desarrolla el negocio bancario, podría ocurrir que las entidades estuvieran buscando oportunidades de obtener rentabilidades mayores a costa de incurrir en mayores riesgos, por lo que la evolución de este tipo de crédito y su morosidad habrá que seguirlas con atención en los próximos trimestre", expuso con suma claridad el supervisor.

TAMBIÉN LAS HIPOTECAS... PERO NO LOS DEPÓSITOS

Aunque los datos del crédito al consumo por la relevancia que este segmento está adquiriendo, también comienzan a apreciarse subidas en los tipos de interés de los créditos destinados a la compra de vivienda. El tipo medio se ha encarecido del 1,83% al 1,96% en lo que va de año.

Para el tramo de operaciones de entre cinco y diez años, el interés pasa del 3,71% al 4,50% entre diciembre de 2017 y abril de 2018. Entre uno y cinco años repunta del 1,58% al 1,71%.

Estos incrementos se producen en un contexto en el que el precio oficial del dinero se encuentra en mínimos históricos, algo que está penalizando el rendimiento que los bancos obtienen con su negocio tradicional. Con estos incrementos, además de responder a una creciente demanda e intentar 'rascar' un mayor interés, el sector ha intentado adelantarse a las futuras subidas de los intereses por parte del BCE.

Sin embargo, la entidad presidida por Mario Draghi ha echado un auténtico jarro de agua encima de esas expectativas. La semana pasada, el BCE anunció, de manera inesperada, que los tipos seguirán donde están "al menos hasta el verano de 2019". Es decir, como pronto, los intereses no subirán hasta septiembre u octubre de 2019.

En contraste, los rendimientos de los depósitos siguen bien anclados al 0% de los tipos oficiales. También según los datos del BdE, el interés medio de las cuentas a la vista se situó en abril en el 0,04%, nivel en el que lleva desde junio de 2017. Y el tipo medio ponderado de los nuevos depósitos, incluyento todos los plazos, se limita al 0,07%. En diciembre estaba en el 0,08%.

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