"La mejora refleja nuestra expectativa de que ArcelorMittal continuará reduciendo su endeudamiento ante la mejora de sus ingresos y flujo de caja operativo, así como de que preservará su fortalecido perfil financiero con una prudente gestión de futuras inversiones y de fusiones y adquisiciones", explicó Gianmarco Migliavacca, analista de Moody's para ArcelorMittal.
La calificadora de riesgos confía en que la multinacional se comprometerá a no abonar ningún dividendo significativo hasta que haya alcanzado su objetivo de deuda neta de 6.000 millones de dólares (5.155 millones de euros), frente a los cerca de 11.000 millones de dólares (9.451 millones de euros) de marzo de 2018, algo que Moody's cree que podría producirse a finales de 2019.
Asimismo, la decisión de la agencia se explica por su confianza en que ArcelorMittal manejará de forma prudente su futura actividad en fusiones y adquisiciones sin poner en riesgo su compromiso con un rating dentro del grado de inversión.
En este sentido, la agencia cree que la adquisición de Ilva por 1.800 millones de euros, que se cerrará en el tercer trimestre de 2018, solo debería representar un pequeño impacto negativo en la salir adelante la compra de Essar Steel, a través de una sociedad conjunta con Nippon Steel & Sumitomo Metal Corporation, esto debería diluir cualquier posible compromiso financiero de importancia que ArcelorMittal habría tenido que hacer frente en caso de haber elegido pujar en solitario por la compañía.
Las acciones de ArcelorMittal registraban una subida del 0,83% a media sesión en al Bolsa de Madrid, donde cotizaban en 27,25 euros.