Alsa se ha adjudicado la explotación del servicio de transporte urbano en autobús de la ciudad de Rabat, en Marruecos, durante un periodo de 15 años, prorrogables por otros siete, un contrato que supone una cartera de ingresos de 1.000 millones de euros, según confirmó la empresa.
Se trata de la mayor concesión de transporte urbano lograda por una empresa española en el exterior.
Con ella, Alsa se refuerza además en Marruecos, extendiendo a una quinta ciudad su actividad en el país.
El contrato, que deberá comenzar a operar en un año, supone gestionar 61 líneas de autobús por la capital y la zona metropolitana de Temara con una flota de unos 500 autobuses.
La compañía del grupo británico National Express prevé llegar a dar servicio a 109 millones de viajeros al año dado que Rabat es la segunda ciudad más poblada de Marruecos por detrás de Casablanca.
Además, el servicio supondrá la generación de 1.600 puestos de trabajo.
Alsa se ha hecho con el contrato en alianza con la firma local City Bus, y en competencia con la compañía que actualmente presta el servicio, TransInvest.
Primer operador en Marruecos
Con la consecución de este servicio, Alsa refuerza el negocio con que ya cuenta en Marruecos, país en el que está presente desde 1999.
En la actualidad, la compañía explota el servicio urbano convencional y otro de alta capacidad de Marrakech, y también los autobuses locales de Agadir, Tánger y Khouribga.
Una vez que el próximo año se ponga en marcha el servicio logrado ahora, Alsa calcula que su negocio total en Marruecos alcanzará una facturación anual total de 100 millones de euros. En conjunto, gestionará en el país una flota de 1.000 autobuses, 3.600 empleados, con los que dará servicio a 270 millones de viajeros.
En un comunicado, la compañía destacó que este nuevo contrato "constituye un paso más" en el compromiso de la empresa con la implantación en Marruecos "sistemas de transporte con estándares de calidad europeos, innovadores y tecnológicamente avanzados".
Alsa, que estaba pendiente de este nuevo contrato desde hacía meses, cerró el ejercicio 2017 con un beneficio operativo de 108,3 millones de euros, un 4,4% más que el año anterior.
Los ingresos de la empresa de transporte en autobús crecieron un 3,6% el pasado año, hasta sumar 757 millones de euros, impulsados precisamente por la actividad internacional y las compras de nuevos servicios realizadas en España.