El Centro Europeo de Implementación de Energía Eólica (EOWDC), como se conocen estas instalaciones, está gestionado por la empresa estatal sueca Vattenfall, que hoy anunció que el pasado domingo la primera de las turbinas puestas en funcionamiento envió corriente a la red nacional de forma satisfactoria por primer vez.
La energía llegó desde una de las once turbinas que forman el parque y se transportó a través de un cable submarino de 66 kilo voltios, que, de forma pionera, se ha instalado en un proyecto de estas características en Escocia.
La generación de energía ha sido anunciada como un hito significativo para este proyecto, que se ha estado enfrentando a numerosos retrasos que incluyeron la disputa legal presentada por Trump, quien afirmó que las turbinas arruinarían las vistas desde su campo de golf en Balmedie, un pequeño municipio al norte de Aberdeen (noreste de Escocia).
En 2015, la Corte Suprema falló en contra de la demanda presentada por la compañía Trump International Golf Links, propiedad del mandatario estadounidense, que entonces anunció "objeciones formales por escrito", que sin embargo, no consiguieron parar el proyecto.
Trump es dueño también de otro complejo hotelero de lujo con campo de golf, el Trump Turnberry, ubicado en Ayrshire, en el sudoeste de Escocia.
Se especula que durante la vista de trabajo que el presidente estadounidense realizará el próximo 13 de julio al Reino Unido pueda acercarse a Escocia, aunque todavía no se han aportado más detalles.
El director del proyecto, Adam Ezzamel, dijo que se han superado "grandes desafíos técnicos y de ingeniería" para lograr la entrada en funcionamiento del sitio y la prioridad ahora es "poner en marcha completamente el parque eólico de forma segura durante el verano".
Además, destacó que el proyecto sitúa a Escocia "como capital energética de Europa y ayudará a establecer la región como un centro internacional para la generación eólica marina".
El parque eólico cuenta con las turbinas más potentes del mundo, que, con una altura de 191 metros y unas palas de 80 metros de largo, generan una circunferencia más grande que la de la famosa noria de Londres "London Eye".