La operación se ha articulado a través de Superstruct Entertainment, que es un vehículo de Providence, creado en 2017, para agrupar marcas de entretenimiento centradas en festivales y en nuevos conceptos de ocio.

Esta plataforma ya ha adquirido anteriormente otros eventos artísticos para darles una dimensión global, como el Sziget de Budapest (Hungría) o elRow, discoteca y promotora española de música electrónica.

Aunque Providence no ha dado a conocer ni el importe ni el tamaño de la operación, algunos medios apuntan a que el fondo norteamericano se ha hecho con el control de entre el 60% y el 80% del capital de Advanced Music por entre 15 y 20 millones de euros.

Tras esta operación, el equipo fundador y directivo de Advanced Music seguirá al frente de la compañía, que en 2016 alcanzó una facturación de 7,5 millones de euros y cuenta con una plantilla estable de unas 25 personas.

El festival Sónar, que este año ha celebrado su 25 aniversario, superó en esta edición los 120.000 asistentes y en 2017 facturó 9,5 millones de euros.

Hace tan sólo unos días, otro fondo de inversión norteamericano, en este caso The Yucaipa Companies, anunció la adquisición de una parte de la sociedad que organiza el festival Primavera Sound, otro de los grandes eventos musicales de Barcelona, que este año ha logrado batir su propio récord de público, con una cifra global de entre 215.000 a 220.000 asistentes.